INFERNUS LUX FERO

“Había una guerra en los cielos, El arcángel Miguel y sus ángeles lucharon contra el Dragón, la antigua serpiente, el príncipe de la oscuridad, Lucifer aquél llamado  “Ángel de Luz” acompañado por sus sirvientes, ángeles con grado de inteligencia. Cada ángel que Dios creó fue en sí mismo una obra maestra. Como un rayo de luz, Lucifer, el más grande entre los ángeles, semejante como ninguno al Altísimo, aquél llamado “Ángel de Luz”, gimió con voz de trueno: “¡No serviré!” y otros ángeles de toda clase y grado de inteligencia exclamaron juntos: “¡No serviremos!”. Entonces empezó la batalla entre la soberbia y la humildad. Miguel se alzó entre todos los demás y proclamó “¡Quién cómo Dios!” No había espada alguna en dicha batalla, espadas que te hacen sangrar y morir. No, era una batalla más mortal aún, una batalla de intelectos, de voluntades, de ideas y lealtades.

Desterrado del Edén, el ángel de luz, Lucifer llamado comúnmente, siendo derrotado por la estrella de Miguel el Guerrero de los cielos entrega 7 maldiciones al ya Ángel Caído, convirtiéndose en piedra para vivir bajo la oscuridad eternamente, sin poder ver la luz del sol, vagando por los infiernos desde el alba hasta el ocaso solar; Por otro lado junto a sus sirvientes a destinado una profecía por cumplir llegado el momento: Cuando el mundo sea azotado por la calamidad, la enfermedad, el hambre y la guerra, el ángel de la Luz renacerá para sumir por completo al mundo en la oscuridad durante 3 días...”

 

Excavaciones en la antigua Mesopotamia.

Fue entonces que Dios expulsó al ángel más hermoso, creado a imagen y semejanza del gran creador o por lo menos el más parecido en beldad e inteligencia. Como una supernova su cuerpo impactó sobre la roca volviéndola ceniza, su piel blanca porcelana entonces se fue transformando en el reflejo de la oscuridad y maldad que yacía en su malvado corazón, se volvió áspera y rugosa, despreciable al ojo humano cambio su apariencia, un monstruo impresionante de piedra, un ángel convertido en gárgola por el resto de los siglos y su alma vagaría por los infiernos esperando subir hasta el trono de Dios y sentarse sobre él junto al gran consejo autoproclamándose el altísimo.

La gárgola fue sepultada con el tiempo en los lugares más inhóspitos y menos explorados por el hombre, ahí se mantuvo oculta bajo la tierra que cimbraba con la llegada de las primeras civilizaciones, el tiempo pasó hasta desgastar el suelo en dónde finalmente los estudiosos  comenzaron a fijar la vista en tesoros antiguos y grandes misterios que acaparaban grandes excavaciones ¿No es el hombre uno de los animales más fáciles de seducir en la tierra? Dios les dio libre albedrio, la oportunidad de elegir –y de equivocarse- ahí con la devoción por el poder, la grandeza, la riqueza; la ambición floreció, Lucifer tendió su primera trampa al ser humano en la que éste cayó cegado por la falsa victoria.

La gárgola fue encontrada completa sin ninguna clase de rasgadura producido por la corrupción del tiempo en las arenas, sus colores ámbar y resina conservaban el color impoluto sorprendiendo las mentes celebres que presenciaban el milagro; una nueva reliquia aparecía ante los ojos expectantes de los arqueólogos de mayor renombre. Siendo pues, el mayor descubrimiento de la historia de todos los tiempo por el tallado de una lengua impronunciable para el humano mortal sobre la base de la gárgola.

Por la gran voluntad de Lucifer, la estatua fue transportada a diferentes sitios en el mundo, desde exposiciones culturales internacionales hasta los más importantes museos en los que su exhibición parecía transformar a mujeres, niños o incluso hombres en verdaderos devotos, una falsa fe que claramente desataba un caos mucho mayor: enfermedades, destrucción y plaga sobre sembradíos. Sin embargo, estos actos no fueron relacionados con la representación del ángel caído tallada en piedra.

“ Y dijo el Señor a Lucifer: ¿De dónde vienes tú? Y éste respondió: He dado la vuelta por la tierra” (Job 1:7; 2:2)

RUMANIA CASTILLO DE BRAN

Situado cerca de Brasov en Transilvania, el Castillo de Bran fue construido por los caballeros teutónicos alrededor de 1212 después de que éstos fuesen trasladados de Palestina al Reino de Hungría, ubicado en la cima de una elevación rocosa cercada por pinos y árboles frondosos además de un terreno difícil de explorar ha tenido el papel de ser uno de los museos más representativos de la historia del país rumano. También de albergar en sus entrañas importantes historias que han trascendido con el tiempo; principalmente la historia de Vlad, el empalador de quien se dice cayó sobre él la maldición de Dios, un hijo más que fue castigado por desafiar la voluntad del Señor de los cielos maldiciéndolo con la profunda sed y la constante hambre, alejándolo de la esperanza y la vida, convirtiéndolo en un muerto andante, un espíritu oscuro, un hijo más de la noche, un demonio consagrado a la perdición y la sangre. Es ahí en dónde la estatua del ángel caído encontró el sitio perfecto para comenzar su completo despertar.

En el solsticio de invierno justo cuando las noches y la oscuridad se vuelve más larga recobrará vida aquella estatua alimentada por la sangre inocente que sus sirvientes reunirán para completar la profecía del ángel de la aurora; Lucifer. Cuando la estrella que trae el mensaje de la destrucción y se encuentre en el cénit en dónde yace la gárgola, será el momento de su despertar, entonces vendrán los tres días de oscuridad e iniciará la guerra entre el cielo y el infierno…