Solo dias antes...

Discordia, el enredo absoluto que niega la razón viviente del corazón valiente de un guerrero cuyas suposiciones orillan a sus sentimientos a actuar por sobre su honorable obediencia –Dragón del Mar… ¿Qué demonios estás tramando? Argumenta ante el mudo viento Bian el Caballo Marino cuya soltada marcha se apega al camino recorrido por el místico y oculto Dragón del Mar “Nuevamente ocultas tus acciones ante tus compañeros Marinas, ¿Qué demonios sucede contigo?” Desconfiado analiza bajo el velo abrazador de las sombras que ocultan su engalanada figura aún disimulada entre una larga túnica opaca cual misteriosa se escabulle entre la penumbra del umbral que conduce al mundo exterior, la superficie terrestre…

Ya la larga caminata encuentra su destino abatiendo el interminable horizonte, de estrecha línea carmín que se dibuja entre la suave mañana que se acomoda hermosa sobre el suelo griego donde las olas marinas rompen vehementes en contra de aquellas costas, justo ahí donde la silueta del místico guerrero del mar se envuelve de misterio escondiendo su presencia con disimulo y agilidad, clavada su mirada esmeralda sobre el sujeto que, amenazante, irrumpe la zona limítrofe del Santuario Atheniense “¿Qué?, ¿Es a caso que planea invadir el Santuario de Athena él solo?” Cuestiona entre lógicas suspensiones mortales que inclusive promueven insensatez dentro de la determinación implacable del Hipocampo “No lo creo, los Dioses mismos deben haber consumido la razón de ese hombre… Eso no es más que un suicidio” Afirma arrogante mientras la figura del susodicho se pierde a poco entre los corredores que se introducen al Santuario.

Obedeciendo su propia voluntad el Valiente sigue adelante más su paso se ve interrumpido por un oriundo de aquella región, su armadura reluciente le delata pues el brillo especial de su coraza se alza a lo alto contra el sol, emergiendo desde la alta cúpula celeste descendiendo para sorprender –¡Alto ahí intruso!, has invadido los dominios del Santuario… Ese pecado será pagado con tu propia vida- Exclama impetuoso en júbilo gallardo que se escapa de su expresión ansiosa cual no inmuta el semblante seguro y sobrio que acompaña siempre el porte característico de aquel guerrero marino –No me estorbes… Caballero- Declama con elegancia –Caballero de Plata, Ptolemy de Sagita- Argumenta presuntuoso, orgulloso de su constelación que le cuida desde lo alto reflejada en el homenaje metálico destellante en su antebrazo cual luce idéntico a una saeta o flecha plegada en dicha parte de la armadura azul –¿En verdad pretendes…- Cuestiona pausado –Enfrentarte al Gran Hipocampo?- Finaliza y, esclavo de la ira, el plateado arremete en contra del suelo con sus pies alzando su postura por lo alto formando su antropomorfa silueta a contra luz del sol deseando deslumbrar la vista del contrario ante el cual propone una ofensiva aparentemente mortal, reclinando su diestra hasta el costado de su costilla donde su cosmos ardiente destella fogoso –Grrr, ¡Muere! ¡FLECHA FANTASMA!- Sonora vociferación que da libertad a un sinfín de saetas traslúcidas, brillosas como el oro precipitándose hacia la postura tranquila e inerte de Bian…

-Ridículo- Argumenta solemne y noble con distinguida despreocupación en cuanto su aura se desata como una nebulosa ondeante. Una nube azulada que emerge como vapor marino envolviendo en totalidad la fisionomía robusta el aquel soldado fiel; mismo quien inunda sus venas con potencia arrastrando su escancia por todo el campo de batalla mientras la energía irradia belleza y esplendor comprable en alteza con lo magnífico y divino –Despídete Caballero…OLEADA ASCENDENTE- Opacando el los vocablos de aquel regional quien se ve amenazado al instante por una corriente eólica tan vehemente como las olas mismas que alzan por los cielos, una energía tan titánica y destructiva materializada entre el cosmos de Bian quien, sin más, en un arranque de velocidad, agilidad y potencia transporta su cuerpo velozmente a través de frio suelo llegando hasta el punto ciego inferior de aquel caballero, justo por debajo de él donde su diestra empuñada hacia el cielo ataca vertical hacia arriba libertando el apocalíptico golpe, resonando como el galope de mil corceles perdidos en el viento. Arrastrando consigo cadenas de viento que se revuelven como un torbellino gigantesco envolviendo al instante el objetivo, desgarrando su piel bajo la presión enorme y alzándolo hasta el más alto punto en que su imagen se disipa en medio del azul cielo matinal,,,

Así todo rival sucumbe ante el gran Caballo del Mar que se jacta de imponente entre el paraje terrenal, engalanado por la fastuosa luz del sol que acaricia su victoria ante sus cabellos castaños que brillan rebosantes de belleza entre las suaves brisas que acomodan su soltada cabellera –Nadie es rival para el Gran Emperador del Mar, y mucho menos para el Gran Bian… ¡El Caballo Marino!- Presuntuoso alega entre el sonar precipitado de las olas que desencadenan su furia, destronando la roca con fuertes corrientes y marejadas que, completamente, invaden el lugar sobrio y tranquilo donde un momento el silencio impera para luego romper sus delgadas notas mudas ante el ígneo torrente cósmico que sobresale desde las aguas aceleradas, estas se abren dando paso a una majestuosa coraza naranja, homenajeada con hermosos detalles oro que recubren casi por completo la efigie de un mitológico ser que elegante se postra ante Bian -¿Qué es esto?...Son…¡LAS ESCAMAS MARINAS!- Milenaria armadura que solo elige a los mas fuertes entre todos los hombres, dispuestos a entregar su vida al Emperador supremo y prendidas en el júbilo tremendo de su alma candente. Misma leyenda plasmada en las nuevas líneas escritas con sangre y sudor de aquel quien recibe de brazos abiertos el esplendoroso, divino y bello brio imperial atribuyendo la energía solemne a la fusión de aquellas esencias míticas…El General y su Escama en el nacimiento impresionante de ¡Bian de Hipocampo, General Marina!

Alteza de los mares, glorificado con la escama camina sin recelo en las tierras griegas siguiendo el rastro sangriento que se disimula en los pocos pétalos quemados que apenas se distinguen en un agrietado camino –Parece que una fuerza colosal destruyó estas flores…Pero ¿Dónde está Dragón Marino?- Cuestiona incrédulo para encontrarse adelante con rosas completas, de dulce aroma que embriaga la mirada con su suculento brillo contrastante con el carmín escenario pues ya dentro de él, en medio de un motín botánico, yace la figura antropomorfa cubierta por las finas flores… -¡Dragón!- Exclama, abatido por la pesadez de pensar en el hecho que conlleva la derrota de un ser tan poderoso en manos de unas simples flores pero, aquella sorpresa menor sería después del nuevo suceso que paulatino se presenta. Los cuerpos celestiales que arden a miles de años luz de distancia arden con intensidad notándose su dorado brillo entre el lucido cielo, esbozando la constelación de los gemelos cual apunta su brillo hacia el cuerpo inerte de aquel sujeto –No puede ser…- Se dice a si mismo con un salto que le esconde entre unos pilares cercanos, oculta al vigilar como una armadura baja desde el panorama celeste para envolver de energía al derrotado servidor de Poseidón, aquel quien se levanta de a poco desorientado y mezclado con la estática energía; como un aura de oro que recibe acogiendo en sus brazos amorosos a un hijo de Grecia… Es aquel el nacimiento de un Santo que conlleva el retiro inmediato del General, apresurado a informar de tal suceso al superior regente Crisaor…

 

 

 

Inmediaciones del Templo de Poseidón en el mar Mediterraneo

 

Después de haber sido envuelto por la enorme ola, Unity el lider de la orden de caballeros azules parece consternado pues aparentemente y bajo un último recuerdo pensó que había muerto, sin embargo ahora a penas abre sus azules ojos y escupeel agua que había tragado en el trayecto al mundo marino...

 

-¿Que sucede? Había sido tragado por una enorme ola y... esa voz con un cosmo inimaginablemente poderoso ¿Habría sido Poseidón?-

 

 Sus pasos a través del mundo marino son lentos pues la incertidumbre lo envuelve preguntandose un sin fin de cosas, pues ahora su paradero es incierto...

 

-Este tipo de vegetación, la presión yacida en este lugar... no hay duda, estoy al fondo del mar...-

 

Para por instantes su caminata, mientras una enorme edificación se expone ante sus pies como un gran templo donde solo un grandioso cosmos se alza...

 

-Y ese debe ser el Mítico templo del emperador del océano...-

 

Conjetura facilmente pues gracias a su pleno conocimiento en Bluegaard, lo ha llevado a conocer todo acerca de las anteriores batallas así como del mundo en general...

 

-Mi padre alguna vez me dijo que la orden azul estaba encargada de vigilar el despertar de Poseidón, y es ahí en la misma Bliblioteca donde se encuentra la entrada a este mundo...-

 

Argumenta el prodigio de Bluegaard, cuando dos guardias aparentemente sirvientes de Poseidon le cierran el paso para explicarle que el lider y emperador del mar lo esperan.

 

"Ahora entiendo, aquella magna presencia en Cabo Sunion no era mas que cierto, el Emperador realmente me requiere en su armada"

 

El recorrido por el magno salon es totalmente enigmático pues el umbral de oscuridad lo invade portando de esta manera la incertidumbre, cuando al momento de arribar al portón que divide de la abadía y el salon principal donde se encuentra la deidad, un alo de luz muestra claramente el asiento del emperador y en el una vasija con el sello de Athena impreso...

 

"Era cierto, se dice que Athena encerró a Poseidón en un cantaro, y ese debe ser"

 

Piensa detenidamente el caballero azul , cuando en una total reverencia, postra su rodilla en el suelo y acto seguido baja la mirada...

 

-Señor, la humanidad ha desperdiciado todo aquello que les han ofrecido los dioses, manchando el mundo de corrupción, violencia e ignorancia, yo Unity el soberano de Bluegaard prometo llevar su utopia a los rincones del mundo y subyugar todo aquello que ha ensuciado la tierra, aquel paraiso que solo los privilegiados podrán pisar... el mar conquistará...-

 

Prolifera, cuando en instantes el enorme cosmos que estaba envolviendo el templo, se hace aún mucho mas poderoso.

 

-Así  mismo-

 
Añade, cuando se para y postra su mirada en dirección del heraldo de Poseidon, su hijo; Krishna de Chrzyaor…

-… Obedeceré las ordenes del comandante de la armada de los mares…-

Con algo de indiferencia es como dictamina el hijo y prodigio de Bluegaard.

 

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Parte II

El cielo se tiñe de negro aún más, la lluvia es intensa, el viento cada vez aumenta mas su velocidad, provocando remolinos que hacen que el vehiculo marino se zarandee cada vez más, cuando de repente.. –Les pasará lo mismo a todo aquel ajeno que intente adueñarse de los recursos de nuestra Isla..- emite mirando los cadaveres, siendo que al instante..

¡¡EO!! ¡¡EO!!

Una gruesa voz sale desde al parecer..la nada, puesto a que solo se vé una fuerte tormenta a todo su alrededor..

-¡¿Qué!? ¡¿Y esa voz, quién es?!- se interroga observando hacia el oscuro cielo..

TU VIDA Y TU DESTREZA ME A ATRAÍDO HASTA TÍ, ES HORA QUE SEPAS QUE AHORA EN ADELANTE DEBERÁS SER UN FIEL SERVIDOR, EL FIEL SERVIDOR DEL EMPERADOR POSEIDÓN, MI VOLUNTAD SE HA CUMPLIDO A RAIZ DE TUS ACCIONES, HAS SIDO CAPAZ DE DEMOSTRARME QUE ERES LA PERSONA INDICADA PARA LOGRAR SER UNO DE MIS GENERALES MARINOS, EO..TU VIDA HA CAMBIADO, SALVARAS AL PLANETA DE TODOS ESOS SERES QUE LO DESTROZAN, ¡¡EO..VEN CONMIGO!!

Aquella voz deja de oírse repentinamente cuando luego un gran tornado acuatico levanta la embarcacion por los aires destruyendola por completo provocando un extraño remolino direccionandose hacia el fondo del mar, sin dejar rastros de Eo.

La tormenta finaliza, el clima vuelve a su estado anterior, sobre la tierra parece todo volver a la normalidad, pero..por debajo del Océano Pacífico..

“¿Donde estoy?” razona levantandose lentamente mirando un nuevo mundo, como si estuviera bajo el agua, cuando en realidad lo está, frente a un gran templo bajo el mar con un enorme pilar que se levanta desde la parte posterior de la construccion..

-Pero..si.. ¿El Mundo de Poseidón?, No puede ser..Estoy en el mundo de Poseidón- asi  finaliza asombrado su aventura frente al majestuoso edificio situacio bajo el Oceano Pacifico Sur,  el cual su historia está a punto de comenzar nuevamente..

Inmediatamente a la vista del gran Eo observa ligeramente a su alrededor lejanos pilares similares al del propio que tiene frente a él, admirandolos completamente con el detalle de uno más grande situado muy lejos de su lugar, tan grande que hacia muy pequeños los restantes el cual parece intrigar al muchacho el contenido del mismo, por eso empieza una ligera carrera hacia el lugar..

Una opaca imagen de al parecer una extraña figura humana en una posicion anticuada sobre el gran portal encima de las escaleras aparece..-¿Quién es el?- se interroga a tono bajo de su vos..”¿Será el mismo de la voz de afuera?” reflaxiona para si mismo mientras no puede quitar su mirada de encima cuando a la vez se acerca mas y mas a paso lento cuando al fin llega al borde de los escalones...

“¡Q...qué..no puede ser, él es..!” finalmente concluye con su duda al notar como fluye a los alrededores ese gran poder interno del cuerpo del Principe del Mar que se encuentra en meditacion extrema , provocando el instantaneo arrodillamiento de Eo notando la sorpresividad en su rostro..-Entonces erás tú..- concluye..

-Asi es Eo, soy Kryshna de Cryzaor, el mítico hijo del Emperador Poseidon, pero ya estás aquí..y debo hacer que cumplas la voluntad de nuestro Padre- explica con suprema tranquilidad y confianza sin mover musculo alguno de su cuerpo hasta que se coloca de pie inmediatamente y con una lanza parecida al del Dios en su mano apunta directamente al Joven.. -¡Mi padre te ha elegido Eo, venérate ante mi y cumple la voluntad de Poseidón!- responde nuevamente con voz de mando dirijiendo su lanza al aspirante a Scylla..

En ese momento miles de recuerdos de su vida atraviezan la mente del Aspirante a la escama de Scylla, sus ojos brillantes lo dicen todo, la emoción por representar una armada para defender ante las catastrofes provocadas por los humanos sobre el Planeta Tierra..

-Y no me iré, he visto como destruyen a nuestro Planeta, Poseidón lo ha visto, tu lo has visto, es totalmente horrible ver eso...- entonces agacha de inmediato su mirada observando el suelo, levantando un pie, quedando incado ante el principe del mar..

-Es por eso que de ahora en más dedicaré mi vida en servir a nuestro Emperador arriesgandola ante todo, con el fin de poder ver un mundo sano, como todos lo quisieran ver- es asi como finaliza sus leales palabras ante Kryshna, entregando su cuerpo ante el Rey, para así comenzar la gran limpieza, destruir a todos los que arruinan la naturaleza, cumplir la voluntad de Poseidón.

Es entonces esta hermosa y paradisiaca tierra invadida por los deseos malsanos de aquellos seres enviados a poblarle, regalo divino de aquellos que rigen el universo en su totalidad siendo dividido el imperio terrenal en tres secciones, la tierra, el inframundo y el mar... no obstante las muertes entre hermanos, ultrajes al projimo y la codicia acompañada de mas antivalores son aquellas injurias que predominan desde el inicio de los tiempos hasta los mas reconditos escondrijos terrestres, es asi, en aquellas regiones de eorupa central justo en las costas portuguesas la prescencia notoria de un joven que deslizandose cual reptil entre los restos de algas y demas vegetacion marina que varada en las orillas sirve de camuflage para este chico el cual caza su alimento con intenciones de sobrevivir, pareciera el sol jamas hace mella sobre su albina piel la cual enmarcando sus famelicas complexiones corporales hace contra de sus habilidades de caceria cuando al encontrar a su victima guarda el singular silencio del acosador anonimo, el cual en las sombras de las rocas divisa su presa acercandose furtivamente para darle el toque final justo en la nuca de aquel batracio que recorria tan inhospito terreno... - costaste trabajo pero mi recompensa es ahora tu carne y tus huesos que serviran como mi sustento pequeño desdichado - menciona entre dientes aquel muchacho el cual sin hacer nada mas que empalar a su virtual cena la monta en sus hombros para asi llevarle a las profundidades del pantano cerca de la playa, sombrio y lugubre lugar infestado de pestilentes olores y densas nieblas las cuales son increiblemente su hogar, su escondite, su fabrica de muerte y destruccion mostrando en cada rincon a su paso entre las plantas y arboles del lugar miles de osamentas que incluyen no solo animales si no tambien huesos y demas miembros humanos de jovenes mujeres y niños como si de trofeos se tratasen - tus restos seran un adorno mas para mi coleccion pequeño aunque esto sigue sin llenarme del todo ...- son las palabras de aquel agil asesino que elevando lentamente su energia cosmica concentrandole en su mano izquierda para dispararle a un tronco el cual arde en llamas tenues, colocando el madero que empalaba al reptil verdoso cerca de la flama comensando a asarse despidiendo un horrible olor el cual se une a cada uno de los aromas que se dispersan por todo el santuario mortuorio el cual ahora es inundado por una estela azul marina la cual se irradia por todo el asqueroso lugar, siendo entonces una voz que emana de ella dirigida al joven directo a su cosmo energia mental dictando - sabras que el mundo esta infectado de la codicia y mas porquerias que impiden la perfecta unificacion de los pueblos, y es mi voluntad el que tu seas quien forje mi legado en cada una de las personas que la habitan, eres tu el legendario guerrero que he elegido para esta singular empresa llevandola de la mano con tu fidelidad absoluta al reino de los mares, yo... el emperador poseidon te ordeno continues esta noble tarea llevando el mensaje a traves de aquellos infieles que han contaminado este regalo de los creadores, muchacho seras a partir de ahora un gallardo miembro de las filas marinas haciendo mi voluntad desde ahora y todo aquel que no acate mi mandato y sagrada autoridad deberas eliminarlo con tus propias manos ...- desapareciendo entre la nada asi como habiase llegado aquella imponente prescencia, hace entonces mella en los pensamientos del joven que largando sus pasos hacia su comida la cual estaba totalmente incinerada muestra sus orbes rasgados algo alterados y sus nervios casi al borde de la locura mencionandose a si mismo - entoces ... ha llegado esa gran oportunidad... matar en nombre de dios para llevar su mensaje de impureza a todos aquellos que han destruido este maravilloso lugar el cual convertire en su propio purgatorio- llevando a sus labios el forjar de una macabra sonrisa colocandose en descanso sobre un caido tronco de arbol que se hallaba a su alcanze es entonces que lanza aquella terrible carcajada burlista la cual se escucha en cada espacio del terreno mencionando de nueva cuenta - me has dado esta gran oportunidad mi señor, !cumplire tu voluntad sin embargo no es mi deseo el seguirte si no el matar y saciar mi sed de sangre que he desperdiciado en tantos humanos y animales en essta pocilga que es mi hogar! jajajaja eres entonces el complice que me dejara asesinar en su nombre y no te defraudare aunque no garantizo el ser controlado o ser alguien que siga las ordenes de alguien mas sere tu mano izquierda y limpiare el desorden que tus mismos hermanos y creaciones han derramado sobre el suelo sagrado de la tierra !- exclama observando las cenizas de su supuesta cena precipitarse ante la gran flama de aquella fogata que se apaga con el comensar de las gotas de lluvia regando todo aquel bello y funesto escenario, recostandose sobre el suelo y dejando entonces aquellas ropas tradicionakles de su pueblo natal sean empapadas por el lodo y musgo que caia de los arboles a consecuencia del chubasco que le azota siendo entonces su mirada escondida tras sus parpados, arrullandose con el sonar de las hojas al contacto con el vital liquido cayente en las inmediaciones de su propio campo de muerte en las costas portuguesas dominios europeos del singular, hermoso y podrido planeta tierra.