A tempranas horas de la mañana el joven Camus, aspirante a Acuario se pasea por las siempre blancas calles del pequeño poblado de Siberia... el cual entre humildes construcciones se forja con sentimientos de amabilidad y un calor único en sus corazones...
* - Buenos días...- Alza su señorial voz el francés dirigiéndose a una joven rubia cubierta con los ropajes propios de tan extremo clima, l camina un poco apurada manteniendo en sus brazos una vasija de presuntas provisiones al eterno invierno..*
*-Ahh??- esboza sorprendida y asustada la joven a la par que caen a la nieve unos cuantos pescados *
* Camus adelanta su diestra buscando ayudar a la joven ponerse de pie mientras termina de recoger sus pertenencias en un gesto de caballerosidad mas sin dejar su frío comportamiento producto de su diario entrenamiento.. mientras su larga cabellera danza junto la eterna ventisca del sitial*
* - Me ha asustado, no es común conseguir personas en este lugar y menos tan desnudos de ropa como usted - siguiendo su camino marcado por las huellas que dejan sus femeninas y pequeñas pisadas en la nieve..*
* La zafirica pupila del joven aspirante se centra en la humanidad de aquella lugareña como si de una fotografía mental se tratase comprendiendo la humildad de las tierras Siberianas y las fuertes tempestades que tienen que soportar... sin pronunciar palabra alguna ni mostrar gesto alguno en su pálido semblante Europeo.. "Hasta luego" *