Es un lugar terrible y desolado, una tierra que se traga a sí misma como los animales de rapiña lo hacen a los desechos.
Dice Krishna de Crisaor, uno de los guardianes marinos del mundo marino gobernado por Poseidón, el dios reencarnado en la mujer llamada Serafina.
Sin embargo, para los planes de la señorita Serafina es un sitio estratégico y por lo tanto debe pertenecer a los dominios de la Atlántida.
Mientras habla para sí mismo, la atención se centra en un gran volcán que despide enormes fumarolas, signo claro de que su actividad volcánica nunca termina, tal vez sea por este motivo que el calor es insoportable, que la tierra seá tan árida y dura y que solo hay alguna poca vegetación y en consecuencia, la vida animal paresca inexistente.
El futuro de este mundo no dista en nada de lo que ahora se puede ver en este miserable lugar. Es tal y como el Kaly Yuga, la era oscura de la que solo el Siddhartha Gautama logro salir. Pero ahora, guiados por la señorita Serafina, un mundo de paz y espiritualidad será establecido.
Ajunta justo cuando su cuerpo se observa recorriendo la base de aquel volcán por una sección del mismo que incluso oculta su cuerpo debido al humo que deja escapar y que se filtra por diferentes chimeneas de la zona baja del volcán.
Una isla azotada de tal manera es el ejemplo del descuido que el santuario de Grecia ha tenido con el mundo... en verdad, no son dignos de llamarse guardianes de nada, por lo tanto, el reino marino tomará el control de todo y regresará las cosas al principio, tal y como debieron ser.
Destinatario: Isla de la Reina muerte
Plazo para completar la misión: Cinco días
Motivo: Conquistar a cualquier costo está isla para honor de la Atlántida
Nomero de visitantes: Uno