Hace algunos años salíamos con una pareja. Fuimos íntimos amigos. Siempre juntos.
Luego nos fuimos a vivir a Estepona un tiempo y ella no hacía más que llamarme para decirme que me echaba de menos que teníamos que volver.
Cuando regresamos coincidió que ella se había reencontrado con una amiga de instituto. Tengo que aclarar que esta pareja se involucró mucho en nuestra boda e incluso él nos hizo de chófer y nos puso su coche.
El caso es que ella siempre fue muy distinta a mí. Por ejemplo (y aunque me considero muy maruja) era una novia muy de las clásicas en todos los sentidos. Tuve que convencerla para que si viniera a un hotel con el novio pues no quería dormir con él antes de vivir con él. Y eso no lo haría hasta después de casarse.
Bueno en fin. Fuimos perdiendo las amistades. Cuando volvimos ella y su amiga planeaban sus respectivas bodas y el color de las colchas de las camas. También hablaban de cortinas alicatados y cosas de ese estilo que a mi no me motivan en absoluto.
El caso es que dejamos de vernos. Y nos quedamos embarazadas casi al mismo tiempo. Encima le puso a su hija el nombre de BEATRIZ (en la Divina Comedia la enamorada de DANTE que es como se llama mi hijo) y aunque al principio me pareció hasta gracioso y pensé que los niños podrían crecer juntos yo luego me di cuenta de que ella esta avinagrada con nosotros. A veces me la he encontrado en la calle con la niña y la he saludado y tal pero nada más. El que había sido hasta compañero de trabajo de Fran estaba alejándose de modo que nos vimos cuando Dante tenía dos o tres meses y hasta ayer.
Y aquí esta la duda.
Ayer nos llama como si nada hubiese pasado para invitarnos el sábado a una cena en su casa con otras parejas. Hemos dicho que contestaremos antes del jueves pero Fran dice que no tiene sentido ir pues no sabría ni de que hablar con el.
A esto he de decir que nuestro último intento por digamos volver a ser amigos fue en mi cumpleaños el pasado junio que los llamé y todavía estoy esperando a que aparezcan.
Por contra me gustaría que Dante se relacionara con otros bebés pues en nuestro entorno no hay ninguno.
¿Iríais a la cena?