¡El amor! Es el ala que Dios ha dado al alma para que pueda subir hasta él.

El amor ahuyenta el miedo y, recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no sólo al amor el miedo expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y sólo queda la desesperación muda; y al final, el miedo llega a expulsar del hombre la humanidad misma.

El amor es un deseo irresistible de ser deseado irrestiblemente.

Existe entre nosotros algo mejor que un amor: una complicidad.

Amor con amor se paga.

La llaga de amor, quien la sana, la hace.

Amor significa unión, y nada ya nos une, ni labios ni vida.

No podemos hacer grandes cosas, pero sí cosas pequeñas con un gran amor.

El amor que nace repentinamente mas tarda en irse.

El amor es la alegría de los buenos, la reflexión de los sabios, el asombro de los incrédulos.

No hay cosa más fuerte que el verdadero amor.

Cuando el amor desenfrenado entra en el corazón, va royendo todos los demás sentimientos; vive a expensas del honor, de la fe y de la palabra dada.

Porque aprecio la vida en su justa medida, al amor lo reinvento y al vivir cada instante, y al gozar cada intento, se que alcanzo lo grande con las alas del alma, desplegadas al viento.

Del amor al odio, sólo hay un paso.

Solo la gente sencilla sabe que es el amor. La gente complicada trata tanto de causar impresión que pronto agota su talento.