La mesoterapia, tratamiento basado en microinyecciones para combatir los avances de la edad en el rostro, tiene ahora una alternativa: la cosmesoterapia, que busca ofrecer los mismos resultados a través de productos cosméticos.
Este es un nuevo tratamiento lanzado por el laboratorio parisino Filorga que es la primera línea de dermocosmética procedente de la medicina estética.
La cosmesoterapia aporta vitaminas, minerales y aminoácidos que combaten los signos del envejecimiento, aunque sin inyecciones. Además, contiene un complejo revitalizante que está compuesto de ácido hialurónico, de alto peso molecular y capaz de hidratar y regenerar los tejidos.
"La aguja consigue introducir en la piel mayor cantidad de principios activos, pero con la cosmesoterapia evita efectos secundarios, como hematomas o reacciones adversas, que surgen a veces", apunta Josep María Azcárate, director del Laboratorio AndoPharm.
La clave de este tratamiento reside en que estos principios activos están encapsulados en liposomas de un tamaño muy pequeño, 0'1 micras, que es "muy inferior al de otras cremas cosméticas, por lo que consigue sin problemas atravesar la piel y situarse en la base de la dermis tal y como lo haría una inyección, aunque en menor cantidad", advierte. Por ello, la cosmesoterapia es perfecta para aquellos que no buscan un rejuvenecimiento facial severo.
Para comenzar a comprobar los resultados de su uso, Josep María Azcárate recomienda esperar a los primeros veintiún días de uso regular del producto, "el lapso de tiempo que comprende el ciclo celular".
Aunque su uso se recomienda en función de las necesidades de cada persona, es adecuado aplicar algunas de sus cremas de uso diario cumplidos los treinta, como acción preventiva, ya que pasados los veinte, la piel comienza a producir ácido hialurónico en menor medida.
Con esta nueva línea de productos cosméticos se hace asequible al gran público los beneficios de la mesoterapia.
"Ahora este tratamiento es accesible para el gran consumo -anuncia Azcàrate-, tanto por el precio como por el hecho de que se puede aplicar desde casa sin contraindicaciones y sin necesidad de asistir a una consulta médica privada".
Uno de estos productos de cincuenta centímetros cúbicos, el equivalente a su uso durante un plazo de mes y medio o dos meses, cuesta en torno a 66 dólares.
Por Héctor Llanos Martínez.