Ten piedad de mí, Señor, porque
te invoco todo el día. Tú, Señor, eres bueno e indulgente, rico en
misericordia con aquellos que te invocan.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, de quien
procede todo don perfecto, infunde en nuestros corazones el amor de tu
nombre, para que, por el aumento de nuestra piedad, afirmes en nosotros lo
bueno y, mediante una atenta solicitud, lo conserves constantemente.
Por nuestro
Señor Jesucristo.
LECTURA
1Tes 5, 1-6.
9-11
Lectura de la
primera carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Tesalónica.
Hermanos: En cuanto al tiempo y
al momento, no es necesario que les escriba. Ustedes saben perfectamente
que el día del Señor vendrá como un ladrón en plena noche. Cuando la gente
afirme que hay paz y seguridad, la destrucción caerá sobre ellos
repentinamente, como los dolores del parto sobre una mujer embarazada, y
nadie podrá escapar. Pero ustedes, hermanos, no viven en las tinieblas para
que ese día los sorprenda como un ladrón: todos ustedes son hijos de la
luz, hijos del día. Nosotros no pertenecemos a la noche ni a las tinieblas.
No nos durmamos, entonces, como hacen los otros: permanezcamos despiertos y
seamos sobrios. Porque Dios no nos destinó para la ira, sino para adquirir la
salvación por nuestro Señor Jesucristo, que murió por nosotros, a fin de que,
velando o durmiendo, vivamos unidos a él. Anímense, entonces, y estimúlense
mutuamente, como ya lo están haciendo.
Palabra de Dios.
SALMO
Sal 26, 1.4.
13-14
R. ¡Contemplaré la bondad del
Señor! El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es el
baluarte de mi vida, ¿ante quién temblaré? R. Una sola cosa he pedido al
Señor, y esto es lo que quiero: vivir en la Casa del Señor todos los días
de mi vida, para gozar de la dulzura del Señor y contemplar su Templo. R.
Yo creo que contemplaré la bondad
del Señor en la tierra de los vivientes. Espera en el Señor y sé fuerte;
ten valor y espera en el Señor. R.
COMENTARIO
Pablo invita a los tesalonicenses a vivir cada día la Venida del
Señor. Invertimos muchos esfuerzos y perdemos mucho tiempo preparando un
futuro que se desea mejor y resulta, cuando llega, decepcionante. La fe
debería jugar un rol integrante en dicha preparación. La fe afirmada en el
Credo debería tener sus repercusiones en la organización global de la vida
diaria y esa inspiración sería la disposición de vigilancia para la venida
del Señor que con tanta insistencia se inculca a los discípulos. No es
lícito cruzarse de brazos. Para Pablo vale más vivir con Dios, en la luz,
cada uno de los días que se nos dan, en lugar de esperar impacientemente
«un día del Señor».
ALELUYA Lc 7,16
Aleluya. Un
gran profeta ha aparecido en medio de nosotros, y Dios ha visitado a su
Pueblo. Aleluya.
EVANGELIO 4 , 31.37
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Jesús bajó a Cafarnaún, ciudad de
Galilea, y enseñaba los sábados. Y todos estaban asombrados de su
enseñanza, porque hablaba con autoridad. En la sinagoga había un hombre que
estaba poseído por el espíritu de un demonio impuro; y comenzó a gritar con
fuerza: “,Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido para
acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios”. Pero Jesús
lo increpó, diciendo: “Cállate y sal de este hombre”. El
demonio salió de él, arrojándolo al suelo en medio de todos, sin hacerle
ningún daño. El temor se apoderó de todos, y se decían unos a otros:
“,Qué tiene su palabra? ¡Manda con autoridad y poder a los espíritus
impuros, y ellos salen!”. Y su fama se extendía por todas partes en
aquella región.
COMENTARIO
Vivimos en una sociedad de opiniones más que de hondas convicciones
personales. Jesús Maestro habló en la sinagoga de Nazaret según las
motivaciones del Espíritu. El público que lo escuchaba, se admiró, pero no
lo aceptó. De la admiración pasan al desencanto y pretenden eliminarlo
violentamente. Su ministerio chocó en primer lugar con el mundo hostil de
las opiniones preconcebidas. Pero su fama se divulgó. Del misterio de su
persona y de su unión con el Padre saca el derecho de liberar integralmente
a todo hombre y a todos los hombres de las alienaciones que padecen. El
Maestro actúa con el extraordinario impacto de su autoridad. Pero su
autoridad está al servicio de quien es excluido o marginado de la comunidad
o de la mesa de la vida. Para él la autoridad es servicio y así quiere que
la entendamos y vivamos los cristianos de todos los tiempos y lugares.
Palabra del
Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, que esta ofrenda sagrada
nos alcance siempre tu bendición salvadora, para que por su poder realice
con eficacia lo que celebra sacramentalmente.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Mt 5,9-10
Bienaventurados los que trabajan
por la paz, porque serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los que
son perseguidos por practicar la justicia, porque a ellos les pertenece el
Reino de los cielos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, restaurados con el pan
celestial, te pedimos que este alimento de la caridad confirme nuestros
corazones y nos estimule a servirte en nuestros hermanos. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Ten piedad de mí, Señor, porque
te invoco todo el día. Tú, Señor, eres bueno e indulgente, rico en
misericordia con aquellos que te invocan.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, de quien
procede todo don perfecto, infunde en nuestros corazones el amor de tu
nombre, para que, por el aumento de nuestra piedad, afirmes en nosotros lo
bueno y, mediante una atenta solicitud, lo conserves constantemente. Por
nuestro Señor Jesucristo.
LECTURA Col 1, 1-8
Lectura de la
carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Colosas.
Pablo, apóstol de Jesucristo por
la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo saludan a los santos de Colosas,
sus fieles hermanos en Cristo. Llegue a ustedes la gracia y la paz que
proceden de Dios, nuestro Padre. Damos gracias a Dios, el Padre de nuestro
Señor Jesucristo, orando sin cesar por ustedes, desde que nos hemos
enterado de la fe que tienen en Cristo Jesús y del amor que demuestran a
todos los santos, a causa de la esperanza que les está reservada en el
cielo. Ustedes oyeron anunciar esta esperanza por medio de la palabra de la
verdad, de la buena noticia que han recibido y que se extiende y fructifica
en el mundo entero. Eso mismo sucede entre ustedes, desde que oyeron y
comprendieron la gracia de Dios en toda su verdad, al ser instruidos por
Epafras, nuestro querido compañero en el servicio de Dios. El es para
ustedes un fiel ministro de Cristo, y por él conocimos el amor que el
Espíritu les inspira.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Los cristianos de Colosas, al igual que en nuestros días, son
tentados de rendirle culto a varios dioses juntos. La fe está amenazada,
pues, arriesga de ser considerada un mero fenómeno humano. Por ello desde
la acción de gracias que dirige al Padre, Pablo recuerda a sus
destinatarios que no hay cristianismo, sino por medio del Evangelio, pues
es gracia de Dios, que no viene del hombre.
SALMO Sal 51, 10-11
R. ¡Confiamos en tu misericordia,
Señor! Yo, como un olivo frondoso en la casa de Dios, he puesto para
siempre mi confianza en la misericordia del Señor. R. Te daré gracias
eternamente por lo que has hecho, y proclamaré la bondad de tu nombre
delante de tus fieles. R.
ALELUYA Lc 4, 18
Aleluya.
El Señor me envió a llevar la buena noticia a los pobres, a anunciar la liberación
a los cautivos. Aleluya.
EVANGELIO Lc 4, 38-44
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
El marco de referencia que la gente tiene del Maestro son sus
milagros. Lo buscaban por las curaciones que había hecho, ante tantos
testigos, a personas “afectadas por distintas dolencias”. Sin
embargo, su unión con el Padre y su espíritu de oración lo llevan a
apartarse a “un lugar desierto”; por otra parte, su espíritu
misionero lo llevan a anunciar el Evangelio “a otras ciudades”.
El no ha venido a hacer milagros, sino a traer el Reino de Dios a todos los
hombres. Y se ha hecho algún prodigio, éste es entonces signo de que el
Reino ha llegado a nosotros.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, que esta ofrenda sagrada
nos alcance siempre tu bendición salvadora, para que por su poder realice
con eficacia lo que celebra sacramentalmente.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN
Mt 5, 9-10
Bienaventurados los que trabajan
por la paz, porque serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los que
son perseguidos por practicar la justicia, porque a ellos les pertenece el
Reino de los cielos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, restaurados con el pan
celestial, te pedimos que este alimento de la caridad confirme nuestros
corazones y nos estimule a servirte en nuestros hermanos.
El Señor lo eligió como Sumo
Sacerdote; le abrió sus tesoros y lo colmó de bienes.
ORACIÓN COLECTA
Señor, que cuidas a tu pueblo con
misericordia y lo gobiernas por el amor; por la intercesión del papa san
Gregorio concede el espíritu de sabiduría a quienes encomendaste la
dirección de tu rebaño, para que el progreso de la grey fiel sea el gozo
eterno de los pastores. Por nuestro Señor Jesucristo.
Palabra de Dios.
LECTURA Col 1,9-14
Lectura de la
carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Colosas.
Hermanos: Oramos y pedimos sin
cesar por ustedes, para que Dios les haga conocer perfectamente su
voluntad, y les dé con abundancia la sabiduría y el sentido de las cosas
espirituales. Así podrán comportarse de una manera digna del Señor,
agradándolo en todo, fructificando en toda clase de obras buenas y
progresando en el conocimiento de Dios. Fortalecidos plenamente con el poder
de su gloria, adquirirán una verdadera firmeza y constancia de ánimo, y
darán gracias con alegría al Padre, que nos ha hecho dignos de participar
de la herencia luminosa de los santos. Porque él nos libró del poder de las
tinieblas y nos hizo entrar en el reino de su Hijo muy querido, en quien
tenemos la redención y el perdón de los pecados.
COMENTARIO
Esta carta fue escrita en la cárcel y, por tanto, con libertad
controlada. Para sus corresponsales, Pablo pide ante todo el verdadero
conocimiento de Dios. Los cristianos no pueden vivir como si su vida ya
estuviera plenificada. Siguen siendo habitantes de este mundo, pero
transformados en hijos de la luz por el conocimiento de Dios. Dios es
inexcrutable. Por la revelación de Jesucristo sabemos de él y podemos
crecer en conocimiento suyo y llegar así a la transformación del corazón.
Por ende, la revisión constante tiene como objetivo, no la realización
individual, sino fructificar «en toda clase de buenas obras».
SALMO SaI 97, 2-6
R. ¡El Señor
manifestó su victoria!
El Señor manifestó su victoria,
reveló su justicia a los ojos de las naciones: se acordó de su amor y su
fidelidad en favor del pueblo de Israel. R.
Los confines de la tierra han
contemplado el triunfo de nuestro Dios. Aclame al Señor toda la tierra,
prorrumpan en cantos jubilosos. R.
Canten al Señor con el arpa y al
son de instrumentos musicales; con clarines y sonidos de trompeta aclamen
al Señor, que es rey. R.
ALELUYA Mt 4,19
Aleluya. “Síganme,
y yo los haré pescadores de hombres”, dice el Señor. Aleluya.
EVANGELIO Lc 5,1-11
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
En una oportunidad, la multitud
se amontonaba alrededor de Jesús para escuchar la Palabra de Dios, y él
estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret. Desde allí vio dos barcas
junto a la orilla del lago; los pescadores habían bajado y estaban
limpiando las redes. Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y
le pidió que se apartara un poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba
a la multitud desde la barca. Cuando terminó de hablar, dijo a Simón:
“Navega mar adentro, y echen las redes”. Simón le respondió:
“Maestro, hemos trabajado la noche entera y no hemos sacado nada,
pero si tú lo dices, echaré las redes”. Así lo hicieron, y sacaron
tal cantidad de peces, que las redes estaban a punto de romperse. Entonces
hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que fueran a
ayudarlos. Ellos acudieron, y llenaron tanto las dos barcas, que casi se
hundían. Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús y le dijo:
“Aléjate de mí, Señor, porque soy un pecador”. El temor se
había apoderado de él y de los que lo acompañaban, por la cantidad de peces
que habían recogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y a Juan, hijos de
Zebedeo, compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: “No temas, de
ahora en adelante serás pescador de hombres”. Ellos atracaron las
barcas a la orilla y, abandonándolo todo, lo siguieron.
Palabra del
Señor.
COMENTARIO
En este relato de Lucas, todo está puesto al servicio de un tema
importante: los llamados son capaces de asumir el riesgo, la inseguridad y
la inestabilidad para seguir al Maestro. Ciertamente que no es una
invitación a abandonar el trabajo y sus exigencias. Se trata cada día de
‘remar mar adentro y echar las redes para pescar” Lucas
relaciona, no sin razón, la vocación- misión de los apóstoles con una pesca
abundante y en aguas profundas. A los ojos de éstos, anunciar el Evangelio
es una empresa de rescate que saca del hundimiento a una humanidad
sumergida y el apóstol se convierte en un «pescador de hombres».
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, en esta conmemoración de
san Gregorio, te pedimos que nos aproveche la ofrenda por cuya inmolación
quisiste que fueran borrados los pecados de todo el mundo.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Cfr.Jn 10,11
El Buen Pastor da la vida por las
ovejas.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, a quienes alimentas con
Cristo, el pan vivo, instrúyelos con las enseñanzas de Cristo, el Maestro;
para que en esta conmemoración de san Gregorio aprendan tu verdad y la
vivan en el amor.
Ten piedad de mí, Señor, porque
te invoco todo el día. Tú, Señor, eres bueno e indulgente, rico en
misericordia con aquellos que te invocan.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, de quien
procede todo don perfecto, infunde en nuestros corazones el amor de tu
nombre, para que, por el aumento de nuestra piedad, afirmes en nosotros lo
bueno y, mediante una atenta solicitud, lo conserves constantemente.
Por nuestro
Señor Jesucristo.
LECTURA Col 1,15-20
Lectura de la
carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Colosas.
Cristo Jesús es la imagen del
Dios invisible, el primogénito de toda la creación, porque en él fueron
creadas todas las cosas, tanto en el cielo como en la tierra, los seres
visibles y los invisibles, tronos, dominaciones, principados y potestades:
todo fue creado por medio de él y para él. El existe antes que todas las
cosas y todo subsiste en él. El es también la cabeza del cuerpo, es decir,
de la Iglesia. El es el principio, el primero que resucitó de entre los
muertos, a fin de que él tuviera la primacía en todo, porque Dios quiso que
en él residiera toda la plenitud. Por él quiso reconciliar consigo todo lo
que existe en la tierra yen el cielo, restableciendo la paz por la sangre
de su cruz.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
En este himno, Pablo describe una expresión auténtica de su fe y de
su amor. Este es uno de los pocos textos que afirma clara y explícitamente
la primacía de Cristo antes de la creación del mundo y que toda ella lo
tiene como modelo. Primogénito de toda creación y de los resucitados, todo
procede de él, se orienta hacia él, y se explica en él. La excelencia
marcada por Cristo no puede ser eclipsada por figuras humanas con
pretensiones de adoración, por otros mesías que pretendan sustituirlo.
Cristo es la cabeza de un cuerpo: la Iglesia, signo de la nueva creación,
una creación reconciliada, restableciendo la paz por su sangre derramada en
la cruz.
SALMO
Sal 99, 1-5
R. ¡Lleguemos
hasta el Señor cantando himnos de gozo!
Aclame al Señor toda la tierra,
sirvan al Señor con alegría, lleguen hasta él con cantos jubilosos. R.
Reconozcan que el Señor es Dios:
Él nos hizo y a él pertenecemos; somos su pueblo y ovejas de su rebaño. R.
Entren por sus puertas dando
gracias, entren en sus atrios con himnos de alabanza, alaben al Señor y
bendigan su nombre. R.
¡Qué bueno es el Señor! Su misericordia
permanece para siempre, y su fidelidad por todas las generaciones. R.
ALELUYA Jn 8, 12
Aleluya. “Yo
soy la luz del mundo. El que me sigue tendrá la luz de la vida”, dice
el Señor. Aleluya.
EVANGELIO Lc 5,
33-39
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Los escribas y los fariseos
dijeron a Jesús: “Los discípulos de Juan ayunan frecuentemente y
hacen oración, lo mismo que los discípulos de los fariseos; en cambio, los
tuyos comen y beben”. Jesús les contestó: “a, Ustedes pretenden
hacer ayunar a los amigos del esposo mientras él está con ellos? Llegará el
momento en que el esposo les será quitado; entonces tendrán que
ayunar”. Les hizo, además, esta comparación: “Nadie corta un
pedazo de un vestido nuevo para remendar uno viejo, porque se romperá el
nuevo, y el pedazo sacado a éste no quedará bien en el vestido viejo.
Tampoco se pone vino nuevo en odres viejos, porque hará reventar los odres;
entonces el vino se derramará y los odres ya no servirán más. El vino nuevo
se pone en odres nuevos. Nadie, después de haber gustado el vino viejo,
quiere vino nuevo, porque dice: el añejo es mejor”.
Palabra del
Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, que esta ofrenda sagrada
nos alcance siempre tu bendición salvadora, para que por su poder realice
con eficacia lo que celebra sacramentalmente.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
COMENTARIO
El tema de la novedad del Evangelio, interpretada sobre todo en
forma de superación del legalismo y ritualismo, se expresa aquí por la
imagen del esposo y las parábolas del vestido y de los odres. Por tanto,
las declaraciones del Maestro apuntan a que vivamos una vida renovada. Ya
no hacen falta las antiguas prácticas penitenciales, porque ya se está
celebrando la fiesta de bodas. No se puede vivir como si todavía estuviéramos
esperando al esposo, al Señor. No se puede vivir como si el Reino no
hubiera llegado. El ya está aquí, está entre nosotros, por tanto, es tiempo
para festejar y estar alegres.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Mt 5, 9-10
Bienaventurados los que trabajan
por la paz, porque serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los que
son perseguidos por practicar la justicia, porque a ellos les pertenece el
Reino de los cielos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, restaurados con el pan
celestial, te pedimos que este alimento de la caridad confirme nuestros
corazones y nos estimule a servirte en nuestros hermanos.
Tú eres feliz, Virgen María,
porque llevaste en tu seno al Creador del universo. Engendraste a tu
Creador, y permaneces virgen para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Dios misericordioso, ven en ayuda
de nuestra debilidad, para que al celebrar a la Virgen María, Madre de
Dios, por su poderosa intercesión nos libres de todo mal.
Por nuestro
Señor Jesucristo.
LECTURA Col 1,21-23
Lectura de la
carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Colosas.
Hermanos: Antes, a causa de sus
pensamientos y sus malas obras, ustedes eran extraños y enemigos de Dios. Pero
ahora, él los ha reconciliado en el cuerpo carnal de su Hijo, entregándolo
a la muerte, a fin de que ustedes pudieran presentarse delante de él como
una ofrenda santa, inmaculada e irreprochable. Para esto es necesario que
ustedes permanezcan firmes y bien fundados en la fe, sin apartarse de la
esperanza transmitida por la buena noticia que han oído y que fue predicada
a todas las criaturas que están bajo el cielo y de la cual yo mismo, Pablo,
fui constituido ministro.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Por la muerte de su Hijo en la cruz, el Padre ha reconciliado a los
hombres consigo. Pero esta reconciliación no se hace a la manera de dos
compañeros que se encuentran y deciden olvidar el pasado. De los títulos
atribuidos a Cristo en el himno paulino se deduce cómo en él, hemos quedado
reconciliados con el Padre. Existe una posibilidad de paz entre el Padre y
los hombres y la clave de esa posibilidad reside en Cristo. El Padre mismo
pone a los hombres en estado de reconciliados en Cristo, previamente a toda
iniciativa de su parte. Con el Padre no nos reconciliamos, somos
reconciliados, ya que en Jesucristo se nos ofrece el perdón y la gracia que
introduce en la vida eterna.
SALMO
R. ¡Dios es mi
ayuda!
Sal 53, 3-4. 6.
8
Dios mío, sálvame por tu nombre,
defiéndeme con tu poder.
Dios mío, escucha mi súplica,
presta atención a las palabras de mi boca. R.
Dios es mi ayuda, el Señor es mi
verdadero apoyo.
Te ofreceré un sacrificio
voluntario, daré gracias a tu nombre, porque es bueno. R.
ALELUYA Jn 14,6
Aleluya.
“Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre, sino por
mí”, dice el Señor. Aleluya.
EVANGELIO Lc 6, 1-5
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Lucas.
Un sábado, en que Jesús
atravesaba unos sembrados, sus discípulos arrancaban espigas y, frotándolas
entre las manos, las comían. Algunos fariseos les dijeron: “,Por qué
ustedes hacen lo que no está permitido en sábado?”. Jesús les
respondió: “,Ni siquiera han leído lo que hizo David cuando él y sus
compañeros tuvieron hambre, cómo entró en la casa de Dios y, tomando los
panes de la ofrenda, que sólo pueden comer los sacerdotes, comió él y dio
de comer a sus compañeros?”. Después les dijo: “El Hijo del
hombre es dueño del sábado”.
Palabra del
Señor.
COMENTARIO
Los medios son siempre secundarios. Es lo que no entendieron
quienes pusieron la Ley por encima de la misma necesidad humana. El derecho
de todo hombre está por encima de cualquier ley. Y el Maestro ha sido un
trasgresor, no de la ley, sino de la costumbre de olvidarse del porqué y
para qué está la ley. Como Señor del sábado trata de restituir la ley
mosaica a su verdad. Sólo el encuentro libre y fiel del creyente con Dios
tiene valor absoluto. Todo lo demás es secundario.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, al conmemorar a la Madre
de tu Hijo, te pedimos que, gracias a este sacrificio, nos conviertas
bondadosamente en una ofrenda eterna.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Lc 1, 49
El todopoderoso ha hecho en mí
grandes cosas. Su nombre es santo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, después de haber
participado de la redención eterna, en esta conmemoración de la Madre de tu
Hijo, te pedimos que podamos participar de la plenitud de tu gracia y
experimentar cada día más los efectos de tu salvación.
Tú eres justo, Señor, y son
rectos tus juicios; trátame conforme a tu bondad.
ACTO PENITENCIAL
- Tú, defensor de los oprimidos.
Señor, ten piedad.
- Tú, libertador de los cautivos.
Cristo, ten piedad.
- Tú, protector de los pobres.
Señor, ten piedad.
SE DICE GLORIA A DIOS
Gloria a Dios en el cielo, y en
la tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te
alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias,
Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único,
Jesucristo. Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el
pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del
mundo, atiende nuestra suplica; tú que estás sentado a la derecha del
Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor,
sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios
Padre. Amén.
ORACIÓN COLECTA
Señor, de quien nos viene la
redención y por quien se nos da la gracia de la adopción, mira con bondad a
los hijos de tu amor, y puesto que han creído en Cristo, concédeles la
verdadera libertad y la herencia eterna.
Por nuestro
Señor Jesucristo.
II. LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El profeta Isaías, a través de ejemplos
concretos, describe cómo Dios renueva la esperanza de su pueblo.
Lectura del
libro de Isaías. Is 35, 4-7
Digan a los que están
desalentados: “Sean fuertes, no teman: ahí está su Dios! Llega la
venganza, la represalia de Dios: El mismo viene a salvarlos! “Entonces
se abrirán los ojos de los ciegos y se destaparán los oídos de los sordos;
entonces el tullido saltará como un ciervo y la lengua de los mudos gritará
de júbilo. Porque brotarán aguas en el desierto y torrentes en la estepa;
el páramo se convertirá en un estanque y la tierra sedienta en manantiales.
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Los hombres siempre hemos soñado con un mundo mejor. El autor de
este libro bíblico, nos dice que ese mundo será obra exclusiva de Yahvé, al
venir él mismo a juzgar y salvar. Para la Nueva Alianza, este don de Dios
no puede ser acogido sino por los hombres que se deciden a colaborar con
él. La tarea es clara: para construir con Dios un mundo mejor es necesario
también triunfar de la guerra, del hambre y de toda clase de opresiones.
SALMO
En respuesta a la promesa del Señor, el
salmo «alaba al Señor» por las maravillas que obra con los que sufren.
Participamos de esta oración, aclamando: ¡Alaba al Señor, alma mía!
Sal 145, 7-10
R. ¡Alaba al
Señor, alma mía!
El Señor hace justicia a los
oprimidos y da pan a los hambrientos. El Señor libera a los cautivos. R.
Abre los ojos de los ciegos y
endereza a los que están encorvados. El Señor ama a los justos, el Señor
protege a los extranjeros. R.
Sustenta al huérfano y a la
viuda; y entorpece el camino de los malvados. El Señor reina eternamente,
reina tu Dios, Sión, a lo largo de las generaciones. R.
SEGUNDA LECTURA Sant 2, 1-7
El cristiano no debe marginar a los
pobres e ignorantes, si pretende ser coherente con su fe.
Lectura de la
carta de Santiago.
Hermanos, ustedes que creen en
nuestro Señor Jesucristo glorificado, no hagan acepción de personas.
Supongamos que cuando están reunidos, entra un hombre con un anillo de oro
y vestido elegantemente, y al mismo tiempo, entra otro pobremente vestido.
Si ustedes se fijan en el que está muy bien vestido y le dicen: “Siéntate
aquí, en el lugar de honor”, y al pobre le dicen: “Quédate
allí, de pie”, o bien: “Siéntate a mis pies”, ¿no están
haciendo acaso distinciones entre ustedes y actuando como jueces
malintencionados? Escuchen, hermanos muy queridos: ¿Acaso Dios no ha
elegido a los pobres de este mundo para enriquecerlos en la fe y hacerlos
herederos del Reino que ha prometido a los que lo aman? Y sin embargo,
¡ustedes desprecian al pobre! ¿No son acaso los ricos los que los oprimen a
ustedes y los hacen comparecer ante los tribunales? ¿No son ellos los que
blasfeman contra el Nombre tan hermoso que ha sido pronunciado sobre
ustedes?
Palabra de Dios.
COMENTARIO
Santiago reacciona con vehemencia frente a la discriminación
sufrida por los pobres en las asambleas litúrgicas. Dicha costumbre
contradice descaradamente el espíritu de Cristo. La dignidad de los pobres
es escarnecida, cuando son ellos precisamente los elegidos con
predilección. Y Santiago no se cansa de proponer el remedio: la fe en
Jesucristo no tolera que se mezcle con ella la acepción de personas, pues a
su luz, todos deben alinearse entre los pobres. Aún más, la igualación
litúrgica obliga a buscar la igualación en todo el ámbito de la convivencia
humana.
ALELUYA Cfr. Mt 4, 23
Aleluya. Jesús
proclamaba la Buena Noticia del Reino, y sanaba todas las dolencias de la
gente. Aleluya.
EVANGELIO Mc 7, 31-37
La curación del sordomudo es un “signo”
de la predilección de Dios por los que sufren.
Evangelio de
nuestro Señor Jesucristo según san Marcos.
Cuando Jesús volvía de la región
de Tiro, pasó por Sidón y fue hacia el mar de Galilea, atravesando el
territorio de la Decápolis. Entonces le presentaron a un sordomudo y le
pidieron que le impusiera las manos. Jesús lo separó de la multitud y,
llevándolo aparte, le puso los dedos en las orejas y con su saliva le tocó
la lengua. Después, levantando los ojos al cielo, suspiró y le dijo: “Efatá”,
que significa: “Abrete”. Y en seguida se abrieron sus oídos, se
le soltó la lengua y comenzó a hablar normalmente. Jesús les mandó
insistentemente que no dijeran nada a nadie, pero cuanto más insistía,
ellos más lo proclamaban y, en el colmo de la admiración, decían: “Todo
lo ha hecho bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos”!.
Palabra del
Señor.
COMENTARIO
Marcos presenta a Jesús frente a un sordomudo. Bastaría una palabra
para sanarlo, pero la pedagogía de la fe exige un ritual de detalles
personalizados. El Maestro se detiene, recibe al enfermo, mete los dedos en
los oídos del sordo, toca su lengua y produce la palabra liberadora:
«Efatá». Los gestos realizados por el Maestro nada tienen que ver con la
magia, sino que son un intento de comunicarse con el enfermo para que éste
sea consciente de la acción milagrosa. Y es que el milagro sólo es
significativo para el que ya cree. La lección es clara: se necesita una
larga iniciación en la fe, para poder escuchar la Palabra y estar en
disposición de proclamarla.
SE DICE EL CREDO
Creo en Dios Padre todopoderoso.
Creador del cielo y de la tierra. Y en Jesucristo, su único Hijo, nuestro
Señor; que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de
Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue
crucificado, muerto y sepultado; descendió a los infiernos; al tercer día
resucitó de entre los muertos; subió a los cielos y está sentado a la
derecha de Dios Padre todopoderoso; desde allí ha de venir a juzgar a los
vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la
Santa Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los
pecados, la resurrección de la carne, y la vida eterna. Amén.
ORACIÓN DE LOS FIELES
4.- Oración de los fieles
A cada
intención, pedimos: Abre nuestro corazón para imitar tu bondad.
·Para que sean correspondidos
los esfuerzos de la Iglesia por dialogar con las otras confesiones
cristianas y las otras religiones. Oremos.
·Para que los dirigentes de la
sociedad den prioridad al clamor de los más necesitados. Oremos.
·Para que los discapacitados no
sean segregados y ocupen, en la sociedad, el lugar que les pertenece.
Oremos.
·Para que todos nosotros
abramos los oídos y el corazón a la palabra de Dios imitando su bondad.
Oremos.
III. LITURGIA EUCARISTICA
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Presentación de las Ofrendas: Después
de alimentarnos con la palabra de Dios preparamos la mesa de la eucaristía.
Junto al pan y el vino, presentemos al Señor el fruto de nuestra
generosidad para socorrer a los más necesitados.
Señor, autor de la verdadera
devoción y de la paz, concédenos que por este sacrificio rindamos a tu
grandeza el debido homenaje y que por la participación de este misterio
vivamos unidos en un solo corazón.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
PREFACIO DOMINICAL DURANTE EL AÑO
Prefacio: Jesús nos muestra su
predilección por los marginados. Por eso, elevemos el corazón en alabanza y
demos gracias al Señor, nuestro Dios, porque en Jesucristo, manifiesta su
amor para con los pobres y enfermos.
ANTÍFONA DE COMUNIÓN Sal 41, 2-3
Como la cierva sedienta busca las
corrientes de agua, así mi alma suspira por ti, mi Dios. Mi alma tiene sed
de Dios, del Dios viviente.
O bien: Jn 8, 12
Dice el Señor: Yo soy la luz del
mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la
Vida.
Comunión: La unión con Cristo, presente
en la eucaristía, alimentará nuestro propósito de imitar su bondad. Con
alegría, vayamos a participar del banquete eucarístico.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, que nos alimentas y
vivificas con tu palabra y el sacramento celestial, concédenos aprovechar
de tal modo el don tan admirable de tu Hijo amado, que podamos participar
siempre de su Vida divina.
Por Jesucristo,
nuestro Señor.
RITO DE CONCLUSIÓN
Canto final: Volvamos a la vida diaria
con la alegría de ser testigos del Señor. Nos retiramos cantando.
Escucha, Señor, y respóndeme;
salva a tu siervo que confía en ti. Ten piedad de mí, Dios mío, pues sin
cesar te invoco.
ORACIÓN COLECTA
Oremos: Dios nuestro, tú que
puedes darnos un mismo querer y un mismo sentir, concédenos a todos amar lo
que nos mandas y anhelar lo que nos prometes para que, en medio de las
preocupaciones de esta vida, pueda encontrar nuestro corazón la felicidad
verdadera.
Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.
PRIMERA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los colosenses (1,
24—2, 3)
Hermanos: Ahora me alegro de
sufrir por ustedes, porque así completo lo que falta a la pasión de Cristo
en mí, por el bien de su cuerpo, que es la Iglesia.
Por disposición de Dios, yo he
sido constituido ministro de esta Iglesia para predicarles por entero su
mensaje, o sea
el
designio secreto que Dios ha mantenido oculto desde siglos y generaciones y
que ahora ha revelado a su pueblo santo.
Dios ha querido dar a conocer a
los suyos la gloria y riqueza que este designio encierra para los paganos,
es decir, que Cristo vive en ustedes y es la esperanza de la gloria. Ese
mismo Cristo, que nosotros predicamos, cuando corregimos a los hombres y
los instruimos con todos los recursos de la sabiduría, a fin de que todos
sean cristianos perfectos. Por eso precisamente me empeño y lucho con la
fuerza de Cristo, que actúa poderosamente en mí.
Quiero que sepan cuántos
esfuerzos estoy haciendo por ustedes, por los de Laodicea y por todos los
que no me conocen personalmente. Se lo digo a ustedes para que todos se
animen, y unidos íntimamente en el amor, puedan alcanzar en toda su riqueza
el conocimiento pleno y perfecto del designio secreto de Dios, que es
Cristo, en el cual están ocultos todos los tesoros de la sabiduría y de la
ciencia.
Palabra de Dios.
Te alabamos Señor.
SALMO RESPONSORIAL SALMO 61
Dios es nuestra salvación y
nuestra gloria.
Sólo Dios es mi esperanza, mi
confianza es el Señor; es mi baluarte y firmeza, es mi Dios y salvador.
Dios es nuestra salvación y
nuestra gloria.
De Dios viene mi salvación y mi
gloria; él es mi roca firme y mi refugio. Confía siempre en él, pueblo mío,
y desahoga tu corazón en su presencia, porque sólo en Dios está nuestro
refugio.
Dios es nuestra salvación y
nuestra gloria.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
Aleluya, aleluya. Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor, yo las
conozco y ellas me siguen. Aleluya.
EVANGELIO
† Lectura del santo Evangelio según san Lucas (6, 6-11)
Gloria a ti, Señor.
Un sábado, Jesús entró en la
sinagoga y se puso a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano
derecha paralizada. Los escribas y fariseos estaban acechando a Jesús para
ver si curaba en sábado y tener así de qué acusarlo.
Pero Jesús, conociendo sus
intenciones, le dijo al hombre de la mano paralizada: “Levántate y ponte
ahí en medio”. El hombre se levantó y se puso en medio. Entonces Jesús les
dijo: “Les voy a hacer una pregunta: ¿Qué es lo que está permitido hacer en
sábado: el bien o el mal, salvar una vida o acabar con ella?” Y después de
recorrer con la vista a todos los presentes, le dijo al hombre: “Extiende
la mano”. El la extendió y quedó curado. Los escribas y fariseos se
pusieron furiosos y discutían entre sí lo que le iban a hacer a Jesús.
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que por medio de
un sacrificio único, el de Cristo en la Cruz, nos has adoptado como hijos
tuyos, concede siempre a tu Iglesia el don de la unidad y de la paz.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.
PREFACIO COMÚN V
Proclamación del misterio de
Cristo
El Señor esté con ustedes.
Y con tu espíritu.
Levantemos el corazón.
Lo tenemos levantado hacia el
Señor.
Demos gracias al Señor, nuestro
Dios.
Es justo y necesario.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor,
Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo nuestro Señor.
Cuya muerte celebramos unidos
en caridad, cuya resurrección proclamamos con viva fe, y cuyo advenimiento
glorioso aguardamos con firmísima esperanza.
Por eso, con todos los ángeles
y santos, te alabamos, proclamando sin cesar: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
La tierra está llena, Señor, de
dones tuyos, de ti proviene el pan y el vino que alegra el corazón humano.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Oremos: Completa, Señor, en
nosotros la obra redentora de tu amor y danos la fortaleza y generosidad
necesarias para que podamos cumplir en todo tu santa voluntad.