Amar a tus vecinos –o a tus enemigos, en tal caso– no tiene nada que ver con la moral o la ética. En vez de eso, la Kabbalah enseña que el amor es un arma formidable para perseguir tu propia causa en la vida, que es simplemente obtener la verdadera felicidad y satisfacción. En otras palabras, te beneficias cuando amas a los demás.
Hoy, abre tu corazón cuando sientes que se está cerrando. Afloja las cadenas alrededor de tu corazón y aprende a amar, sólo porque sí.