Si el trabajo espiritual y entusiasmo de una persona están basados en sus sentimientos en un día particular, inevitablemente caerá. Los kabbalistas nos recuerdan que necesitamos hacer el trabajo aún cuando no estemos sintiendo la "energía".
Es fácil ser espiritual cuando estás alegre, pero no tan fácil cuando estás desinflado. Sin embargo, es en los momentos de fastidio en los que podemos revelar la mayor Luz.
Hoy, busca esos puntos donde estás harto, cuando lo que menos quieres es compartir o conectar con una herramienta espiritual. Recuerda la lección anterior y empújate. Algunas veces es ese paso extra el que hace toda la diferencia, en tu vida y en la vida de otros.