Existe una historia sobre una mujer que decide encontrar a Dios. Ella se deshace de todas sus posesiones mundanas, vuela a la India, escala la montaña más alta que puede encontrar, y se sienta a orar y meditar. Ella llama a Dios "¡¿Dónde te encuentras?!" Y Dios le responde: "Estoy aquí abajo con la gente".
No tenemos que hacer votos de pobreza y vivir en un "Ashram" para conectarnos con nuestro Creador. Sólo necesitamos conectarnos con la gente para hacer esa conexión divina.
Hoy, dedícate a tres personas. Encuentra en tu corazón la forma de hacerlas sentir mejor, cubrir sus necesidades, motivarlas para que se involucren más en sus vidas.