Primero ponemos agua con sal en un cazo y cuando hierva, cocemos en ella los huevos. Los dejamos unos 13 minutos y luego los retiramos, los pasamos por agua fría y los pelamos cuidadosamente.
Luego cortamos los huevos en rodajas finas, que vamos colocando en una fuente de servir. Echamos un chorrito de aceite por encima y espolvoreamos con un poco de pimentón.
Finalmente cortamos unos trocitos de cebollino, que ponemos encima de los huevos y añadimos un poco de sal Maldon.