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| De: stefy1945 (Mensaje original) |
Enviado: 28/01/2012 22:02 |
Si pide por gula
Cuando un perro o un gato están bien alimentados, es difícil que luego vengan a pedirnos comida cuando somos nosotros los que estamos en la mesa. Por lo tanto, la primera máxima a cumplir para que esto no ocurra es darles de comer antes de comer nosotros. Pero si aún así, no nos los quitamos de encima, una buena solución es agitar una hucha llena de monedas. Entenderán pronto la indirecta y nos dejarán en paz, porque el sonido metálico les molesta muchísimo. Esta hucha puedes hacerla tú misma, llena una lata de refresco con monedas y tapa la abertura con esparadrapo.
Fuente: Revista Mía |
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La higiene de tu mascota
Es muy importante que tu perro o tu gato tenga una boca limpia y fresca. Para evitar el mal aliento, después de alguna de las comidas puedes darle un trocito de manzana sin piel para que la muerda. El mismo limpiará sus dientes de forma natural sin tener que usar otro tipo de productos.
Fuente: Revista Mía
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En coche
Si viajas en coche con tu perro, pon una manta y un plástico impermeable en el asiento trasero. En el caso de que tu coche sea familiar, puedes ponerle en el maletero (siempre y cuando lo hayas habituado antes). Así el conductor se distraerá menos y el perro estará mucho más cómodo.
De viaje
Si te vas de viaje y no tienes con quién dejar a tu gato durante el fin de semana, compra dos recipientes con tapadera y cronómetro. Llénalos de comida y pon el cronómetro para que se abran las tapaderas a la hora que tú elijas. Los venden en tiendas para animales y son muy prácticos.
Fuente: Revista Mía |
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Gatos
A veces, los gatos hacen sus necesidades donde no deben y la mancha que dejan huele fatal. Límpiala frotándola con un paño empapado en amoníaco, además de eliminar la mancha y el olor, conseguirás que no vuelva a hacerlo en el mismo sitio porque no soportan el olor a amoníaco.
Perros
Si acabas de comprarte un perro y aún es pequeño, procura mantener los armarios bien cerrados para que no muerdan tus zapatos, ya que serán su juguete favorito. Es mejor que compres objetos adecuados para que se entretenga, y fortalezca sus dientes.
Fuente: Revista Mía
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Amaestrando a tu perro
Amaestrar a un perro requiere mucha paciencia. Si quieres enseñarle a sentarse, saludar, etc., en vez de pegarle, dobla un periódico y le das sobre el lomo; no le haces daño y, en cambio, el ruido le impresiona.
Bañando a tu gato
Sólo en caso de que el pelo del gato esté muy sucio se justifica el tener que bañarlo. Si tienes que hacerlo, para no tener problemas, mantén desde un principio al animal en un lugar muy cálido; rocíale poco a poco con agua a la temperatura de la mano, acláralo bien y frótalo hasta que esté completamente seco. El champú que utilices podría ser uno de uso infantil.
Fuente: Revista Mia
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Trinos melodiosos
Muchos pájaros no cantan porque se sienten solos. Y esto es normal, pues pasamos muchas horas fuera de casa. Si para ti es como de la familia, cuídalo un poco más: ponle, muy pegado a los barrotes, un pequeño espejito. El creerá que está con otro pájaro y se pondrá mucho más contento. Además, puedes echarle en el comedero un trocito de regaliz y una yema de huevo cocido bien mezclada con miga de pan. Volverá a cantar y además, su canto será mucho más alegre.
Orejas del gato
Si tu gato se rasca continuamente las orejas, tendrás que limpiárselas con un algodón empapado en aceite de oliva y frotando (sólo la zona exterior y con suavidad) hasta que desaparezcan los rastros de cera que son los que han podido causar la irritación. Pero si aun así el animal continúa rascándose, puede ser por otro tipo de motivos internos más importantes. Llévalo al veterinario.
Fuente: Revista Mía
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Dientes limpios
Si quieres prevenir el sarro en la dentadura de tu pequeño felino, límpiale los dientes, de vez en cuando, con una solución compuesta por agua y sal a partes iguales. Y si se trata de un perro, dale de vez en cuando un trozo de pan duro. Al roerlo, él mismo se encargará de limpiarlos.
Perro herido
¿Tu perro está herido y tienes que llevarlo a un veterinario de urgencia? En primer lugar, acércate a él con suma precaución e intenta ponerle un bozal, aunque sea improvisado, para que no muerda a nadie. Eso sí, no le pongas nada si observas que tiene una lesión en el pecho o problemas de respiración. Luego, coloca una manta debajo de él y pide a otras dos personas que te ayuden a levantarlo para que se mueva lo menos posible en el trayecto.
Fuente: Revista Mía
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Antiparásitos
En cuanto sospeches que tu mascota puede tener pulgas, añade a su comida un poco de cebolla o de ajo o, si lo prefieres, una cucharada de levadura de cerveza. Cualquiera de estos tres productos, las mantendrá a raya.
Fuente: Revista Mía |
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