EL MISTERIO DE JULES VERNE (JULIO VERNE)
“La sociedad de la Niebla”… Así se denominaba esta secta de escritores revolucionarios, como Alejandro Dumas, George Sand, Gerard de Nerval o el mismo Julio Verne, a la que también pertenecían otros artistas, no solo literarios si no, también del arte de la pintura como Delacroix o Poussin. También personajes influyentes en la farándula y el teatro y de la escena social del siglo XIX.
De hecho, Julio Verne estuvo tan ligado a dicha Sociedad, que en sus propias novelas habla de ella, pero tan sutilmente, que de no ser por los investigadores literarios, nunca nos daríamos cuenta de ello, por ejemplo: en su novela titulada “La vuelta al mundo en 80 días”, el personaje principal (Phileas Fogg) pertenece a un club teosófico llamado “Reform Club”, y cuyas iniciales (R y C), coinciden con la sociedad “Rosacruz” (R+C) = (Rosa Cruz) vinculada totalmente a la de “La Niebla”.
Por otra parte el nombre de su personaje (Phileas Fogg) Phileas puede descomponerse en “eas”, que en griego significa “todo” y es el equivalente a “Poli”, convirtiendo al personaje en “Polífilo” = (Phileas). En cuanto al segundo nombre (Fogg), significa “niebla”, cuyo nombre correspondería a la Sociedad Secreta de la que era miembro el escritor.
De lo que no cabe duda, es que todos los autores que estuvieron vinculados a esa sociedad o sociedades secretas, transformaron el modo de pensar de millones de personas, moldeando su inconsciente y preparándoles para “una nueva clase de sociedad”. Una sociedad que sería mucho mas sofisticada en muchos aspectos y en la cuál habría grandes e importantes “descubrimientos”. Pero la pregunta es: ¿Cómo eran conocedores de esos supuestos descubrimientos, antes de que éstos salieran a la luz en la sociedad? ¿Cómo es posible, que un escritor del siglo XIX supiera la distancia exacta de la Tierra y nuestro satélite Lunar? ¿Cómo sabía el lugar más idóneo para lanzar un cohete como es Cabo Cañaveral, teniendo en cuenta que él lo sitúa a tan solo dos kilómetros de margen del lugar de donde se lanzan hoy día? ¿Cómo conocía la forma adecuada de un cohete y la velocidad que necesitaba para salir de nuestra atmósfera y el tiempo que le llevaría llegar a su destino en la Luna? ¿Cómo sabía la fórmula para crear oxígeno en el interior de la cápsula?
En cuanto a la novela “20.000 leguas de viaje submarino”, describe un submarino de carácter nuclear, capaz de producir corriente alterna, la cual no se descubrió hasta 1882, es decir, hasta pocos años antes de la muerte del escritor, y teniendo en cuenta que la fecha de la novela data de 1869. También describe unos buceadores totalmente autónomos de movimiento, con sus “mochilas” de oxígeno a la espalda, la cual no fue descubierta hasta el año 1878, en que Henry Fleus patentó el primer equipo de buceo autónomo empleando oxígeno puro como medio respiratorio. Se basaba en un circuito cerrado en un saco respiratorio, el cual llevaba un cartucho de 30 kg x Cm 2. de presión, y un cartucho que contenía el elemento purificador del anhídrido carbónico.
MI OPINIÓN:
Por otro lado, en su “Viaje al centro de la Tierra” describe una comunidad intraterrena. Presumiblemente podría tratarse de una población avanzada en tecnología, y que yo personalmente, creo que Julio Verne llegó a conocer en realidad. De ahí podrían venir sus “dotes” de visionario, o sus conocimientos de todas esas tecnologías aún por llegar en su época.
No, amigos, no creo que Julio Verne fuera un visionario, o un loco como lo han catalogado muchos… yo creo sinceramente que cuando plasmó esas cosas en sus novelas, sabía muy bien sobre lo que escribía, y también creo que su Sociedad Secreta “La Niebla”, eran perfectos conocedores también de dicha tecnología, y no les gustó en absoluto que Verne lo plasmara en sus novelas, ya que tomaron la decisión de eliminarlo para siempre para que guardara silencio. El propio sobrino de Julio Verne, que pertenecía a la Sociedad, fue el encargado de hacer tan horrendo “trabajo”, y en pleno Boulevard le disparó dos veces a su tío, hiriéndole en una pierna de la que quedó cojo de por vida. Por suerte para el escritor, su sobrino se asustó tras los disparos y huyó del lugar dejándole malherido, pero con vida. Aunque este hecho, sumió al escritor en una profunda tristeza y tomó entonces una decisión: Escribió todo lo que sabía sobre tecnología, es decir, su secreto, y se lo entregó a su mejor amigo, Albert-Dominique Roze, que además era el escultor que le había hecho su lápida para cuando falleciera y le pidió que lo guardara en lugar seguro presagiando ya su muerte.
La tumba de Julio Verne, se encuentra en el cementerio de “La Madeleine”, en Amiens, (Francia), una pequeña ciudad ubicada al Noreste de París. En ella se observa a Verne emergiendo de su tumba, y levantando su brazo derecho y con la mirada hacia el cielo. La escultura fue bautizada con el nombre de “Hacia la inmortalidad y la eterna juventud”. Tres años después, el 20 de Enero de 1910, fallece Honorine, la esposa del escritor, la cual fue enterrada en la misma tumba, junto a su marido.