mis versos rebrotan de amor,
mis letras viajan a la eternidad,
imagino tu voz, tus caricias.
Mi amado querubín que me inspiras
el canto al amor, hechizas mi alma,
otoño de mi vida encandilas
mi inspiración, y sublime y boyante
Tiembla mi pluma solo imaginar,
mi blanco papel refugio de lontananza
se agita en la fragua de mi pasión,
el tiempo se detiene y presiento
que eres el fin de mi ilusión.