Cinco sentidos
Cierro los ojos,
en mis espacios. Sola.
Analizo en el silencio que me rodea.
Un zumbido recoge el murmullo mixto del entorno.
Se acerca la noche,
Los grillos alzan sus protestas de miedos,
chasquidos de pájaros negros,
y la melodía de un bolero se escucha a lo lejos.
Analizo el silencio envuelta en velos.
Cinco velos cubren los recuerdos.
Cinco velos cobijan la piel que un día se cubrió de besos.
Toco con delicadeza el velo amarillento
que ocultó mi rostro ante el altar prometiendo amor eterno.
Sigo protegida del velo decorado con lentejuelas verdes,
ese siempre ha estado ahí,
guardado en mis pequeñas manos desde niña.
Cierro los ojos en largo silencio,
Se ilumina de momento el carnaval de la vida,
hace rondas por mi cuerpo.
Intenso torbellino de amores incompletos.
Promesas incumplidas ríen a carcajadas acompañando mis duelos,
lágrimas secas se humedecen de nuevo.
Un grito profundo intenta sacarme del infierno.
Solo me salva la sonrisa eterna de mi madre.
Bendita madre que me dio esta vida
tan llena de vivencias,
decorada en arco iris
iluminando la fortuna de amores intensos.
Agradezco el silencio,
me lleva de las manos por pasadizos
desde donde valoro los cinco sentidos que poseo.
Carmen Amaralis Vega Olivencia