Ven abrázame y llévame a ese oscuro rincón, donde las cortinas de la ventana se elevan por el viento... Donde se refleja la luz de luna en la altura del cielo con luceros de esperanza, donde solo estamos tú y yo...
Deja que nuestros labios sientan el momento, y que nuestras miradas hablen por nosotros, acércate a mí, ámame como la primera vez, despierta ese deseo, que tanto espera por ti.
Te abrazare fuerte encima de esa camisa que me estorba, besare tu cuello y acariciare tus mejillas, te susurrare un te amo, -No me arrimes tanto- me sentiré presa, de un sorbo tomare de tus labios, como una copa de vino, celebremos con Champagne las caricias de la noche, sigue rozando tus labios por mi cuello siguiendo por mis brazos y con tus manos siente la suavidad de mis piernas.
Déjame sin fuerzas, toca mi pecho! ¿Sientes esa bomba latir? Por ti explota... y me delata... respóndeme ¿porque hacemos lo prohibido? -El corazón nos grita, no es prohibido- nos devoran los pensamientos de un segundo, estar tan cerca de ti... es sentir mil momentos en un solo minuto... que haces que no me besas si mis labios gritan fuerte por ti...
Toca mis caderas son tuyas, bésalas, muérdelas, siéntelas... que para eso tienes sentidos, saborear y sentir! Desarrópame, quiero un poco de frescura, ¿Sabes? sube a mi cintura y llévame a ese colchón que está en el suelo con sabanas blancas, que tu fuego por mis venas corre... Hagamos un minuto de silencio, el viento nos escucha... Recuéstate encima de mí y desborda esa pasión que tanto has esperado por mí...