TIMIDA
Por Jose Luis Gonzalez
Miami Fl. USA
Era timida,
le gustaba que no le preguntara nada,
se ponia neviosa al verme,
pero le encantaba
cuando estaba al frente de ella.
Esa forma de ser,
con la mezcla de la timidez
y su nerviosismo,
me gustaba.
Ella pensaba que yo era un gran hombre,
le encantaba escucharme.
Hablaba poco,
como siempre,
preferia tomarme del brazo
a tener que hablar.
Un dia la observe
que me miraba fijamente,
le pregunte:
¿ tienes algo que decirme?
ella respondio,
no,
solamente te miraba,
y eso me encanta.
Era timida en gran manera.
Recuerdo que en cierta ocasion,
fuimos a cenar a un restaurante.
hale la silla en donde ella
se sentaria,
luego me sente al frente de ella,
y con el pie,
golpeo el mio,
me dijo que me sentara a un lado de ella
y no al frente,
recosto su cabeza sobre mi hombro,
y la senti satisfecha.
Era timida,
se ponia nerviosa cuando le regalaba flores.
A mi me encantaba llegar de sorpresa
a su casa.
Casi siempre se enteraba que yo iba
de camino,
se daba cuenta
cuando veia a su perro
correr muy alegre a mi encuentro,
ella,
tambien corria
para arreglarse en un minuto.
Su timidez me encantaba,
me gustaba verla nerviosa,
ella preferia que no la presentara
a mis amigos.
Su timidez me encantaba,
fue su mejor forma de enamorarme,
yo, en el fondo
me sentia importante a su lado,
la ame asi,
y ella lo sabia.