Alabado sea
Jesucristo…
Formar comunidades vivas, dinámicas que respondan a algún
desafío y un propósito permanente es algo complejo.
Los compromisos laborales, la cultura individualista, y
algunos otros pretextos, nos mantienen encerrados en la zona de
"confort".
La dispersión, y no la cohesión, nos retrata. En la
comunidad eclesial pasa lo mismo, participamos en celebraciones religiosas
masivas, sin preocuparnos de estrechar lazos de comunión y solidaridad con los
demás, que trasciendan el ámbito sagrado.
Se nos complica crear iniciativas de servicio a la
comunidad en general o a los miembros de la parroquia en particular.
Dispensarios, manualidades, servicios de ayuda
psicológica, clubes de lectura, bazares, mutualidades, cooperativas, mercados
de economía solidaria y otros más, podrían ser caminos para convertirnos en una
comunidad alternativa, en luz de las naciones.
"La verdad católica"
Sagrado
Corazón de Jesús. Mil gracias por concederme un
día más para adorarte y servirte. Hagamos como
decía San Agustín: Señor a Ti solo busco, a Ti
solo amo y tuyo quiero ser. Mi único deseo es conocerte
y amarte. (Sol 1,1,). La mies es mucha y pocos son los
obreros para recogerla. Es la Palabra de Dios.
Alabado sea Jesucristo. Amén. Yo dibulgo
cada día Pequeñas Semillitas, con el vehemente deseo de
que se propague la Fe, en el Sagrado Corazón de
Jesús y suplico a todos los creyentes y no creyentes, que pidan al Señor Jesucristo en oración, que no haya más guerras ni hambre en el Mundo, ni atentados terroristas ó políticos de guante blanco, y reine la Paz, así como el Amor,
en todos los rincones del Orbe. Así sea. Detente,
el Sagrado Corazón de Jesús, está conmigo. Casimiro
López