Convocados por la Embajada cubana en Barbados, representantes de diversos sectores de este país y miembros del cuerpo diplomático acreditado se dieron cita la víspera en el Monumento que recuerda a los 73 caídos, el 6 de octubre de 1976, como consecuencia del primer y más grande sabotaje contra un avión civil en el hemisferio occidental.

El solemne tributo, se inició con un minuto de silencio y luego como ha sido costumbre en los últimos cuatro años, la banda de música de la Real Fuerza de Policía de Barbados entonó los acordes de los himnos nacionales de ambos países.

Charles Burnett, Secretario Permanente (Viceministro) de la cartera de Relaciones Exteriores, habló en nombre del gobierno de Barbados, reiterando la solidaridad con los familiares de las víctimas y confirmando la posición de este país de apoyo a Cuba en la búsqueda de justicia.

Representantes del Movimiento de Solidaridad con Cuba, de la Comunidad de Cubanos Residentes y del grupo de cooperantes del deporte hicieron uso de la palabra y en todos los casos expresaron su firme rechazo al sabotaje terrorista ocurrido hace 38 años, exigieron justica, condenaron la complicidad del gobierno de los EE.UU en estas acciones e hicieron un llamado al Presidente Obama para que asuma una posición coherente en su cacareada batalla contra el terrorismo y en consecuencia enjuicie al confeso terrorista Luis Posada Carriles, autor intelectual del sabotaje de hace casi cuatro décadas, y libere a los luchadores antiterroristas cubanos Antonio Guerrero, Ramón Labañino y Gerardo Hernández, presos en el Imperio.

La Embajadora cubana Lissette Pérez tuvo a su cargo las palabras centrales del homenaje en las que apuntó: “Lo ocurrido frente a las costas de Barbados hace casi cuatro décadas no es un hecho aislado. La cruel política de terror contra Cuba que ya tiene 50 años es aborrecible. Desde el triunfo de la Revolución Cubana derivados de actos terroristas han perdido la vida 3478 cubanos y 2099 han sido incapacitados”, recordando el alto costo humano de estas acciones.

Luego de narrar pormenores de la política norteamericana, principal sostén del ambiente de terror que se ha experimentado contra Cuba, la Embajadora enfatizó: “Llamamos a todas las personas dignas del planeta a juntar sus voces con el pueblo cubano para detener las acciones que aún siguen planificándose y financiándose desde EE.UU y romper el mando de silencio que se ha tendido sobre el caso de los Cinco cubanos presos injustamente en cárceles de aquel país”.

Finalmente Pérez expresó la eterna gratitud de Cuba al pueblo y gobierno de Barbados por el apoyo en la batalla por la justicia y contra el terrorismo de estado durante todos estos años” y sentenció:

“Hay todavía una historia de injustica en las aguas de la playa “Paraíso” (lugar donde se calcula cayó el avión en 1976). El asesinato a sangre fría de 73 personas a bordo del avión cubano fue un crimen en contra de aquellas inocentes personas, sus familiares y sus países. Aquel abominable acto fue también un crimen contra Barbados y su pueblo.”

Al finalizar el acto, representantes de las diferentes organizaciones depositaron ofrendas florales en la base del Monumento que recuerda las víctimas del horrendo crimen.