Una lagrima guardada
Una lágrima guardada
por cada suspiro reprimido,
por cada mirada desviada,
por cada disco devuelto,
por cada sonrisa forzada
cuando es llanto lo que oculta,
por tantos besos muertos en mis labios,
por cada susurrar tu nombre sin eco en el espacio.
Por cada adiós dicho en silencio
cuando nuestras espaldas se ven alejarse,
por cada sueño interrumpido,
por cada vez que te busco en la multitud sin encontrarte,
por cada noche sin luna,
por cada insomnio latente,
por el hueco vacío de tu mano
donde era mi cuerpo el que antes lo llenaba,
por cada vez que me reprimo para no llamarte,
por tantas veces que decido callar.
Y una lágrima, especial, guardada
por lo que fuimos alguna vez y aún lloro
deseando, en lo profundo de mi interior... volver.
Mi colección de lágrimas
tiene un bono especial:
Por cada lágrima guardada
te dedico mi sonrisa más alegre, más amable, más generosa
por cada vez que pienso que eres feliz
creando tu propio destino aunque yo no esté ahí.