Por esa luz pequeña,
por ese parpadeo de tus ojos...
Madre Dios puso tu cuerpo, en un pedestal
de una mano divina,
aguardando tu llegada a la orilla del rió y
el tiempo, alcanzando la fugas estrella.
¿Dónde ensombreció tu cielo?
Lleva la historia de un zafiro de amor...
Una madre que se fue callada y triste entre
la dicha y el sueño, donde ella apago la luz de
sus ojos,,porque ¿ era su destino llegar al cielo?
Pensando en su partida me quede sin aliento,
jubilo de juegos en su jardín florido de las primeras
lágrimas de dolor, tal vez no vera mas el sol que alumbraba
su belleza de mujer.
Dios anuncia su vuelo, sus ojos inquietos miraban la claridad
de una nube blanca.
Ella mi madre pasara por esa luz celestial, buscando el camino de la
entrada del paraíso, madre se marcho ante dijo adiós hijos
míos.
Voy por esa luz que alumbrara mi caminar hasta la puerta
que se llega al hermoso cielo.
MARÍA AHUMADA BARRAZA. CHILE.