¡¡¡  EXISTIR CON SABIAS RAZONES !!!

 *** Versos de la Rosa ***

Por cariño un cónyuge distingue a la señora

 la sumisa compañera de familia trabajadora,

que mejor agrado que poseer estas ventajas

 esas soberanas matronas que sabían querer,

admirables beneficiarias para sostener hijos.

 Que ofrecieron esa felicidad sin elevar la voz

  saben dignificar esa moralidad  en su familia,

 acaparando ese sentir afectivo de su marido

  que condimenta con ganas papas para cenar,

 mientras los vástagos dormitan con placidez.

 Todo lo que había en el pueblo se compartía

 aunque los sustentos escaseasen en la casa,

todo se agrupaba para distribuirlo con rigor

todos los vecinos compartíamos esa comida,

equilibran ese ansia de no tener lo que falta.

 Para entre todos poder llenarnos las bocas

  magnánimo saber motivan sus costumbres,

 cuando los humanos exigen esa solidaridad

  que mejor querer que ese valor sea humano,

 ejercitándolo siempre con generosa caridad.

 Como árbol para calentar se alegra un abeto

  cuando el campesino corta el tronco esbelto,

 nos congraciamos esos necesitados de leña

  portando mucha madera para atizar su fuego,

 con insuficiencias añadidas de hogar obrero.

 Sin preguntarle a las coníferas sus derechos

 antes deseo esa brasa de hogar enternecido,

  que la poderosa lumbre de su fiesta pagana

 apoyando su temple de amistad excepcional,

  para ayudar a germinar su arboleda natural.

 Siempre comparto esta solidaridad humana

 aunque no me quede nada más que caridad,

eso se acompaña como sensibles hermanos

 ese pantalón viejo lo heredan sus pequeños,

las prendas se repasan elevando su utilidad.

 Calcetines repasados por la esposa querida

 estupendas comidas de guisados sin carne,

 cocinando una tortilla, sin patatas ni huevos

 la madre protege su gente de tanta pobreza,

 equivale a su esencial valor de humanismo.

 Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

14.- de junio año 2019

Existir con sabias razones, es saber practicar las viejas costumbres de los antepasados, para sobrevivir al aciago futuro de la humanidad.

Nuestros antepasados sabían vivir y guardar su sabiduría contra los especuladores que querían borrar sus sabias costumbres y su dignidad.

Negra desgracia es tener que vivir envueltos en un petroleo que arruina la salud y la naturaleza de la Tierra.

Tenemos que sobrevivir con la sabiduría del pensamiento, la palabra y la obra, de nuestros sabios antepasados.

El Hombre de la Rosa