La mujer desde tiempos pasados se sometía a los
caprichos y órdenes del varón, desde que nacía la
tenían predestinada a ser ama de casa, madre y
esposa sumisa, enseñándole las labores del hogar,
tiempos aquéllos en que no existía la equidad de
género, parecía que nacer dentro del sexo femenino
era sinónimo de obediencia, sumisión y sobre todo el bajar la cabeza ante el macho que ordenaba.
Aún así eran felices, se casaban muchas veces sin amor,
con personas mayores o de igualdad de edades, con el
paso del tiempo en muchas ese amor llegaba
en otras por la educación que le daban dejaba
que el tiempo pasara entre hogar e hijos, sin tener
derecho a réplica, sin tener derecho muchas veces
a sentir, a defender, no en todos casos,aunque se
sabía que si en una de esas mujeres nacía la rebeldía
se le sometía a castigos y golpes de la pareja.
Hoy en día, la vida ha cambiado, las mujeres trabajan,
son profesionistas y hasta tienen altos cargos en el
gobierno para bien del sexo femenino. Pero también
a pesar de la modernidad existen muchas mujeres que
se quedaron en el ayer, sumisas y abnegadas que se
dedican a su hogar bajo el mando de la pareja que solo
ordena y que muchas veces llegan hasta los golpes por
satisfacción o tan solo por el simple hecho de hacer saber
que son los amos, los dueños absolutos del hogar. Me
pregunto, cuando la mujer vive de esta manera, es sumisión
o es por amor que soporta esta vida. Creo
que es difícil de explicar.
He conocido a Magaly, hermosa niña que vivía sometida
a las órdenes de su abuela, quien fue su madre de
crianza porque la verdadera madre no pudo mantenerla
adecuadamente y con el carácter fuerte que tenía se
quedó con ella quien fue creciendo de esta manera
sumisa y abnegada quien al cumplir 16 años su abuela-madre,
la obligó a casarse con un tipo hijo de una amiga de ella
que tenía buena posición económica, ella, por sumisión y
no quedándole otra opción se casó con este tipo quien
la maltrataba tanto que muchas veces no salía de su casa
por los moretones que tenía en el cuerpo producto
de las golpizas que éste le daba.
Un día él la abandona por otra mujer quedando ella libre
de esa mala vida que llevaba. A los dos años conoce a
un niño, acorde a la edad que ella tenía 18 años y se
enamoran con un amor tan hermoso, tan bello que todos
quienes la conocían y querían le ayudaban a verse a
escondidas, ella logra convencer a su abuela y entra
a trabajar a una oficina haciendo la limpieza, ahí todos
la amaban, dulce y cálida, tierna y trabajadora
que robó el corazón de los jefes.
Cuando estaban juntos decían que si uno moría, se
llevaría con el a su pareja porque no podrían
estar separados ni aún por la muerte.
Ella queda embarazada y la abuela le empieza a dar
cocimientos y brebajes para que aborte al bebe una
tía siendo enfermera le aplica inyecciones para lo mismo.
Pero Dios es grande y el bebé sigue ahí en su vientre
fortaleciéndose, en el trabajo una mujer era su jefe
inmediato y le empiezan a inyectar vitaminas y darle
alimentos sanos sin saber lo que sucedía con su abuela…
Pasa el tiempo y a un mes de cumplir el ciclo de su
embarazo le detectan leucemia, le dicen a su pareja
que ella no tiene opción de vida y que el bebé en su
vientre es un motor que la mantiene viva. Y así fué
cuando el bebé nace a las pocas horas ella pierde la
vida… nadie nunca dijo sobre los medicamentos
que le daban para perder al bebé y que la debilitaron
tanto provocándole esa leucemia. Nunca vi a nadie
sufrir como a ese niño que la amaba tanto.
Al año de haber fallecido ella, su pareja que nunca
pudo sobreponerse a la pérdida de su amada muere
instantáneamente en un accidente dejando al hijo
sin ninguno de sus padres, quedando al cuidado de
su abuela paterna. Hoy tiene 20 años y siempre que
lo miro recuerdo a Magaly y a su padre que se amaron
de tal manera que vencieron el tiempo y
siguen juntos en el cielo.
Una historia triste más que quise compartir
con ustedes, espero sus opiniones.
|