El asunto es vivir bien, lo que a su vez nos ayudará a alcanzar muchos años de vida.
Una cosa es ser viejo y otra cosa es tener muchísimos años.
Tener muchísimos años no se riñe con sentirse joven. Saberse viejo, pareciera que obliga a comportarse como tal.
Comparto lo que dijo Walt Jones a los 110 años:
¿Qué edad tendrías si no supieras la fecha en que naciste y si no hubiera un Calendario que te deprima una vez al año?.
De seguro nos sentimos mas jóvenes de la edad que tenemos.
Ahora bien la gran pregunta es: - ¿a cuál edad le debemos hacer caso?
Lo que a continuación comparto son algunos detalles, cosas simples, pequeñas
claves que evidencian la calidad de la vida que llevamos.
Creo que lo especial no está en lo grande, lo espectacular, lo extravagante.
Lo profundo está en lo sencillo, lo trascendente está en los detalles, lo complejo está en lo simple.
Si cuidamos lo sencillo, los detalles y lo simple que hay en lo cotidiano; si miramos con atención como vivimos la vida y después de comprometernos a incrementarla...
-Confío en que nuestra calidad de vida y nuestra juventud nos acompañará hasta el último de los días... dentro de muchísimos años.