Ayer preguntaron por ti, yo no supe que decir, lagrimas de mis ojos sin permiso quisieron salir.
Perdido solo e infeliz se van mis pasos con profundo dolor, herido el alma desnudo mi cuerpo, sin ti.
Me duele hasta las entrañas de saber que todo terminó, cuando me dijiste… “todo se acabó, lo siento” bebiendo mis lágrimas de sal vago despacio por un camino silente.
Un bloque de cólera se anida en mi garganta, doblado de dolor esta mi espalda, sombras y tinieblas atenazan mi felicidad por que tu, no has sabido comprender a este hombre que te sabe amar.
Ese amor eterno que un día juraste nunca sembraste, solo fue un tentáculo de tus sentimientos heridos, nada te importó que me dejaste ahogar en un estanque de ira y rabia.
Tu nunca, nunca has visto llorar un halcón, ni saltar a una cigarra, menos caminar a una hormiga, me asfixia este nudo de mi garganta, me ahogan las lágrimas, te has marchado tu ya te has ido queda de mi amor el cielo de testigo.
El Caminante...
|