Con tu carita rosada,
tu mirada celeste,
y tu cabello dorado,
estrellas en tus labios,
mariposas en tu vientre,
vencere la timidez
y el miedo,
para tomar tus manos
mi corazon latía
temblaba mi cuerpo
que ardía,
sonrojado sin ti
entristecía noche y día,
mientras la luna
con su luz
el lago regaba,
solo sombras reflejaba
aquella noche
que desde lejos te miraba,
aquello
era una penumbra lejana,
seguir hablando
con la lengua trabada,
romántica y bella
con tu carita rosada,
mi valentía en ti
quedo sembrada,
un impulso de deseo
en mis labios
de bravo guerrero,
fue directo mi boca a tu boca,
y con una leve sonrisa,
se estrellaron las lenguas
y quedaron los dientes rotos
que locos,
mi corazón era un tropel
se contagió mi alegría
a los rayos del sol,
la rosa que florecía
con sus pétalos en rocío
se extendio como un manto,
y caminando sobre ellos
su perfume nos roció,
como un beso inocente
el amor en los dos creció,
abrimos el fuego del amor
como encantados adolescente.
El Caminante... |