Es que hoy le he soltado eso a un colega de profesión que me está intentando sonsacar sobre un informe que estoy haciendo y en el que él indirectamente tiene intereses y yo ya me he hartado.
- ¿Sabes guardar un secreto?
- Sí, claro.
- Pues yo también y no te lo puedo contar.
Punto final.