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El cardenal Carlos Amigo estrecha las manos a monseñor Asenjo el jueves, en el momento de su relevo al frente de la diócesis de Sevilla EFE/EDUARDO ABAD
A favor del placer
Sí, sí, sí, sí, así, así, así... Rotundamente están a favor del placer. Me refiero a la Federación de Servicios de la UGT de Andalucía que, la pasada semana, se reunió en Jerez para abordar sus temas más prioritarios. Entre ellos, el de regalar bolas chinas a las ugetistas asistentes. ¿Bolas chinas? ¿Qué no saben lo que son bolas chinas? Pues a ver cómo se lo explico. Son unas bolas que introducidas en los bajos de las señoras proporcionan, según las iniciadas, un placer irrepetible, cien por cien oriental. El refinamiento sexual de las chicas supera el listón, marcado en su día, por Isabel Preysler y su revolucionaria técnica del carrete. Entre las agraciadas hubo de todo. Quien las puso a prueba antes de la cena. Y quien salió de allí enojadísima por el machismo imperante. Queda, en cambio, descartado que el Instituto de la Mujer se pronuncie sobre un asunto tan húmedo.
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