Coincido en que hay muchas injusticias e inmoralidades en la sociedad que todos conocemos.

Algunas de ellas son de toda la vida, en todos los países y con cualquier gobierno. Yo reconozco que a veces no soy para nada objetivo y los demás se dan cuenta. Por eso quizás , puesto del otro lado, en esta ocasión veo en esta nota ese  "¡Y tú mas!" al que en España estamos tan acostumbrados. Quizás sea efectivamente inmoral todo lo citado, incluído el 5% de aumento a todos los funcionarios del Estado, que gozan de estabilidad asegurada de su empleo hasta su jubilación, prebenda esta de la que no goza ningún trabajador de ninguna otra actividad privada por cuenta propia o ajena. Si a eso le agregamos que tenemos cuatro millones  largos de parados, congelar esos salarios me parece una medida solidaría con ellos, porque lo de los políticos no va a variar y lo cierto es que de sus bolsillos no saldrá el dinero para ayudar a esos parados. La demagogia hay que dejársela a ellos , a los políticos.