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General: Sade y el sadismo
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Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: Maite998  (Mensaje original) Enviado: 10/09/2011 00:09

EL MARQUES DE SADE

EL OTRO MARQUES DE SADE
"No te has desvanecido.
Las letras de tu nombre son todavía una cicatriz que no se cierra,
un tatuaje de infamia sobre ciertas frentes,
cometa de pesada y rutilante cola dialéctica,
atraviesas el siglo diecinueve con una granada de verdad en la mano
y estallas al llegar a nuestra época"


El prisionero, homenaje a D.A.F de Sade, por Octavio Paz.
Sade nació en Paris en 1740, en el seno de una familia noble de Aviñón. Por sus obras padeció destierro, estuvo varias veces en la cárcel y terminó enclaustrado en el manicomio de Charenton, donde murió en 1814.

De él se ponderan sus actividad y su imaginación sexuales. Le adjudican, a su práctica, la creación de la palabra sadismo. Todo lo que horroriza a las buenas conciencias se le endilga a Sade.

Pero hay otro Sade: cara distinta de la misma moneda. Es el que señalaron, Jean Paul Sartre y Simone de Baeuvoir. Esta última, en su ensayo sobre Sade, nos ofrece esta visión:

"En la soledad de los calabozos, Sade tuvo también su noche ética parecida a la noche intelectual con que se envolvió Descartes. No logró el surgimiento de su evidencia, pero por lo menos discutió todas las respuestas demasiado fáciles. Lo que constituye el valor supremo de su testimonio es que nos inquieta. Nos obliga a plantearnos el problema esencial, que bajo otras apariencias obsesiona a nuestro tiempo: las verdaderas relaciones del hombre con el hombre" (Marqués de Sade. Filosofía en el tocador. Introducción. Edimat Libros, Madrid, 1988, Pp. 7-8)

No se trata de minimizar sus prácticas sexuales, ni de justificarlas. No se trata de creerlo santo. Se trata de ver al otro hombre. El hombre de pensamiento. El que analizó su tiempo y sus circunstancias. El hombre que abogó por la libertad, por el papel benefactor del Estado en la vida colectiva, por la verdad sin máscaras de ignorancia, miedo o superstición. El pensador que en forma nítida fue capaz de escribir:

"El hombre que se somete realmente a las leyes de la naturaleza, no tiene necesidad de otras leyes. Y en caso de que las normas naturales no constituyan un freno para él, las demás normas no conseguirán resultados más satisfactorios" ( P. Sánchez Paredes. El Marqués de Sade, un Profeta en el Infierno. Ediciones Guadarrama, Madrid, 1974. P.125)
La actividad política y libertaria de Sade está marcada por la cárcel. Frente a cualquiera de sus desplantes ideológicos la respuesta del Estado era la prisión. Así, entre otras pasó por las cárceles de Lyon, Miolans, Chamberry, Vinncennies, La Bastilla La Madelonnettes, Carmelitas, Saint Lazare, Picpus y Chareston, donde muere un 2 de diciembre. En total fueron más de 27 años de presidio.

Las acusaciones conra Sade se centran en el libertinaje, la sodomia y la impiedad. "Ante todo fue un hombre perseguido, un gentilhombre, emparentado con familias de sangre real, que por flagelar más o menos levemente a la vagabunda Rosa Keller en 1768, y por darles bombones laxantes a cuatro putas de Marsella en 1772, pasó los mejores años de su vida encerrado en el castillo de Vicennnes y en La Bastilla" ( Jorge Gaitán Durán. Sade Seix Barral, 1977.

Pero lo que más incomodaba a la monarquía francesa era la rebeldía politica del Marqués y su actitud revolucionaria durante el régimen jacobino. Su obra incluye novelas, , teatro, relatos y un abundante carteo, todo lo cual fue publicado apenas a mediados del siglo XX.

Lo paradójico del asunto es que todo lo que narra Sade no fue invento de su imaginación desmesurada: todo eso lo hacían los grandes señores de la aristocracia francesa: lo hacían y lo ocultaban: La gran furia contra Sade se debía a que él había destapado el cádaver. Esa hipocresía llegaba al punto que en su contra de sus obras se escribió: " (son) un atentado a la moral pública en general y a todos los estamentos sociales y gubernamentales del país y del mundo entero" ( Marqués de Sade. Filosofía en el tocador. Edimat Libros. Madrid, 1988)
Por otra parte, la palabra "sadismo" es de la autoría del psiquiatra alemán R. von Kraft Eibing, que la ubica como una persona opuesta al masoquismo, "en la que el placer sexual va asociado a humillaciones y torturas"

Quizás el libro más escalofriante del Marqués de Sade es "Las ciento veinte jornadas de Sodoma". Sabemos que fue escrito estando preso en La Bastilla y que durante 37 días continuos, Sade en letrilla microscópica describió varios de los episodios sexuales más espeluznantes de la literatura universal. El texto salió del presido y se perdió. El Marqués lo lloraba y se quejaba de que esta pérdida era "la mayor desgracia que el cielo podía reservarme" fue recuperado y publicado noventa años después de muerto su autor.
Sánchez Paredes, el crítico que escribió El Marqués de Sade, un profeta del infierno, sostiene: " No creo que ninguna persona sana moralmente pueda leer "Las ciento veinte jornadas de Sodoma" y experimentar placer en ello". En el libro, de unas 600 áginas, se describen, reduciendo el número, incestos, adulterios, sacrilegios, sadismos, prostitución, felaciones, cunnilinguis, mutilaciones, asesinatos, coprofagias, baños con excrementos, bestialismo y suplicios de diverso orden.

Cuando estalla la Revolución Francesa, el Marqués de Sade está en La Bastilla. Desde la cárcel se las ingenia, mediante un tubo que le sirve de micrófono, para agitar a las masas que merodean por el panóptico. El regidor de la prisión lo saca, pues teme que su instigación termine de derribar a la monarquía. En su nueva cárcel, a los nueve días, es liberado por el turbión revolucionario.

Por su inactividad física, en esos años Sade ya está gordísimo y ciego de un ojo y camina con dificultad. No obstante, continúa su trabajo de disidente intelectual. Lo cual permite pensar que Sade es uno de los paradigmas del intelectual moderno en occidente. Su frenética actividad literaria y sexual no le impiden pensar y plantear temas que mantienen toda la frescura contemporánea como los esbozados en Alina y Valcour o la novela filosófica.
Sade no descansa. Es un luchador por la libertad. Apenas es liberado, es nombrado para formar parte de los tribunales revolucionarios, en los que se destaca como hombre solidario con los desvalidos y los enfermos. Alli, en 1793, tiene un choque fundamental: se niega a firmar varias penas de muerte. Por ello es encarcelado y condenado a la guillotina.

Sade se defendió con una sólida argumentación y logró ser indultado. Ocho años después es enviado nuevamente a prisión por el escándalo provocado por la publicación de Justine. A ello se unió la furia de Napoleón con Zoloe y sus dos acólitos, obra que se endilga falsamente al Marqués y que constituye una sátira al gobernante francés.
En el ideario político de Sade, según Sánchez Paredes, se encuentran aspectos que hacen del Marqués un hombre de avanzada:

a.- Igualdad de derechos y libertades del hombre y la mujer.

b.- Escuelas públicas para que todos los niños sean educados.

c.- Enemigo de la pena de muerte.

d.- Niega la caridad como instrumento de dominación de los poderosos y de sumisión de los humildes.

e.- Repudia la justicia basada en el poder del dinero, pues éste justifica todos los abusos y arbitrariedades.

f.- Imagina la utopía de Tamoe, donde no existe la propiedad privada y la gente vive con dignidad.

g.- Cree que la naturaleza no ha creado a los hombres desiguales. Son los hombres los que crean las desigualdades.

h.- Las cárceles "no deben estar destinadas a aniquilar al delincuente, sino a rehabilitarlo".

i.- Sólo Dios es necesario, sobran los templos y los sacerdotes.

j.-El sexo, como el sueño y la alimentación, es una necesidad primaria. Reprimirlo es un pecado contra la naturaleza.
Pese a que su actividad sexual fue desenfrenada, Sade no mató a nadie. En carta a su esposa, desde la prisión de Vicennes, es categórico en afirmar: " Soy un libertino. Lo admito. He imaginado todo lo imaginable en este terreno. Soy, pues, un libertino, pero no un delincuente o un asesino


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Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: Xana Enviado: 10/09/2011 16:01

Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: Maite998 Enviado: 10/09/2011 22:26
- Cree que la naturaleza no ha creado a los hombres desiguales. Son los hombres los que crean las desigualdades.

h.- Las cárceles "no deben estar destinadas a aniquilar al delincuente, sino a rehabilitarlo


 
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