Los miedos
Cada día manejo con más sensatez mis miedos. No me ganan tan fácil. Están, lo se, pero los anulo, les saco ventaja. El miedo al fracaso es parte importante del miedo a lo desconocido.
Acepto que todo lo que pasa tiene que pasar, es el propio camino el que me lleva a darme cuenta de esto. La realidad esta más allá de las apariencias. Frecuentemente sufrimos sin necesidad, nos privamos de la alegría por cosas que no valen la pena. Cuando se enfrentan dificultades la neutralización anima a uno a tomar distancia y elevarse por encima de la conmoción, descubrimos la paz cuando en nuestra vida nos animamos a poner orden y armonía.
Me perdono a diario, no me atosigo con culpas innecesarias, no creo en tener que rendir examen todos los días, la vida es más simple de lo que pensamos, mas tranquila de lo que hemos aprendido.
Escucho con atención cuando me hablan, si veo que intentan manipularme yo trato de no hacer lo mismo.
No discuto..... No me gustan los conflictos, los veo como un signo de debilidad, quien grita ofende a costa de tener razón, no me interesa tener razón, quiero disfrutar de la vida. Es mas importante lo que sentimos que lo que sabemos.
He podido reconciliarme conmigo y con algunas personas importantes. Las relaciones se sanan con el consentimiento de las dos partes, con las ganas de dejar atrás los agravios mutuos, los errores y de edificar en el amor un nuevo circulo.
Cada uno hace lo que puede, todos estamos buscando una razón para vivir, todos queremos saber quienes somos, tratemos de comprendernos mutuamente. Por lo general se forman opiniones y se abren juicios sin conocimiento real de la historia del otro, sepamos que cualquier cosa que este pasando esta sirviendo y es un paso necesario en el plan de todas las personas involucradas
Cuando uno se rinde ante la vida puede abstraerse de los muchos detalles estresantes que nos estorban.