EJEMPLO - Amigos en crisis se ayudan

NAIROBI, AFRICA – Un hipopótamo bebé que sobrevivió a las olas del tsunami en la Costa de Kenya ha formado una relación muy fuerte con una tortuga centenaria macho, en un resguardo para animales en la ciudad de Mombassa.

Bautizado como Owen, el hipopótamo de un año que pesa como 300 kilos, fué arrastrado en la corriente del río Sabaki hasta el Océano Indico, y después fué forzado a la playas cuando las olas del tsunami golpearon la costa de Kenya el 26 de Diciembre.
El hipopótamo fue encontrado por guardianes del parque Haller cuando estaba perdido y deshidratado cerca de un río que desemboca en el Océano Indico.

La amistad con la tortuga, que tienen un color gris oscuro similar al de los hipopótamos adultos, surgió cuando Owen fue llevado a una reserva natural en la ciudad costera de Mombasa.

La tortuga se llama Mzee que en idioma suahili significa hombre viejo.

Es increíble. Un hipopótamo de menos de un año de edad ha adoptado como madre a una tortuga macho, de como un centenar de años de edad, y la tortuga parece estar muy contenta con ser una ‘mamá’.” La ecologista Paula Kahumbu, quién está a cargo del parque Lafrge, le comentó al AFP:

“Después de que fué arrastrado y perdió su madre, el hipopótamo estaba traumatizado. Tuvo que buscar algo que fuera su madre substituta. Afortunadamente dió con la tortuga y formó una relación muy fuerte. Ellos nadan, comen y duermen juntos", agrego la ecologista.

“El hipopótamo sigue a la tortuga exactamente como seguiría a su mamá. Si alguien se acerca a la tortuga, el hipopótamo se pone agresivo, como si protegiera a su mamá biológica,” agregó Kahumbu.

“El hipopótamo es un joven bebe, fué dejado solo a una edad muy tierna por la madre naturaleza, los hipopótamos son animales sociales que les gusta estar con su mamá por cuatro años,” ella explicó.

Pauline Kimoti, gerente de turismo del parque Haller, le contó a la BBC que los dos animales "duermen juntos, comen juntos y se han vuelto inseparables". "El hipopótamo sigue a la tortuga por todas partes y le lame la cara."

“Mucho de la vida no puede ser explicado sino sólo presenciado”. Poder apreciar, valorar y encontrar la profundidad de los actos de amor de los seres del reino animal, puede enseñarnos mucho para nuestra vida, para nuestro obrar cotidiano. De esta forma podremos honrar la virtud y la maestria que nos han demostrado con esta amistad.