Una sonrisa no cuesta nada
y en cambio...¡Cuánto da!
Enriquece a quien la recibe
sin empobrecer a quien la otorga
Una sonrisa es cosa de un momento
y sin embargo, casi siempre perdura en la memoria
Nadie hay tan rico ni poderoso
que pueda pasearse sin una sonrisa,
y nadie es tan pobre que no pueda
ser enriquecido a si mismo con una sonrisa.
Crea y protege la buena suerte en los negocios
y es el gesto mas apreciado en la amistad
Brinda descanso al fatigado,
entusiasmo al abatido,
alegría al triste,
y es el antídoto natural mejor que existe
contra las dificultades.
Sin embargo, la sonrisa es algo
que no puede ser comprado, mendigado
ni tampoco se puede pedir como préstamo,
porque es un don que no tiene valor
sino hasta el momento en el
que se prodiga espontáneamente...
Hay seres tan cansados de la vida,
que ya no pueden otorgar sonrisas.
Démosle a ellos una de las nuestras,
porque no hay nadie que más lo necesite
que aquellos que no tienen sonrisas que ofrecer