Amanecer entre tus labios, escribir poemas sobre tu piel,
Descubrir la inmensidad de la vida en tu mirada…
¿Cuánta mas poesía necesito en mi vida?
¿Qué tanto mas cerca puede estar, mi alma de poetisa,
de los desconocidos orígenes del verso?
Adormecida entre tus brazos, buscando la palabra exacta,
Intente convertir en silabas la profundidad del sentimiento.
Mientras tu hablabas, el amor llamaba, y se alzo en mi alma el artista.
Conocí la dicha de saber que existías, el abrazo de sentir lo indecible.
Sentí el hambre de no tenerte presente, y la ilusión de reencontrarme con tus ojos.
Y mi verso vive por siempre en tus labios,
Y mi amor duerme eternamente en tu pecho.
Ahora se que en mi alma, en mi poesía, el nosotros, jamás será un recuerdo.
Y cual la luna, inmutable y protectora, velare tus sueños mas hermosos.
Y mi felicidad seguirá naciendo siempre en tu sonrisa.
Porque para añorar ya no hay necesidad, porque contigo la nostalgia es un imposible.
Y el amor no tiene un final.