Autor: Enciclopedia Católica | Fuente: www.enciclopediacatolica.com 1. María: profetizada en el Antiguo Testamento.
|
Enciclopedia Católica. ¿Existen pasajes bíblicos que anuncien la llegada de María, como los hay de Jesucristo? Si en los Evangelios casi no se habla de María, ¿cómo sabemos dónde vivió, con quién, cómo era...? ¿Cómo trataron los primeros cristianos a María
|
|
El Antiguo Testamento se refiere a Nuestra Señora tanto en sus profecías como en
sus tipos o figuras. Génesis 3:15La primera profecía
referente a María se encuentra en los capítulos iniciales del Libro del Génesis
(3:15): "Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu linaje y el suyo;
ella te aplastará la cabeza y tú estarás al acecho de su talón". Esta
versión parece diferir en dos aspectos del texto original hebreo:
En primer lugar, el texto hebreo emplea el mismo verbo para las dos
versiones traducidas "ella te aplastará" y "tú estarás al acecho"; la
Septuaginta traduce el verbo en ambos casos por "terein" (estar al acecho);
Aquila, Símaco y los traductores sirios y samaritanos traducen el verbo hebreo
por expresiones que significan aplastar, magullar; el Itala traduce el "terein"
utilizado en la Septuaginta con el término latino de "servare" , vigilar; S.
Jerónimo (1) sostiene que el verbo hebreo tiene el significado de "aplastar" o
"magullar" más que el de "estar al acecho", "vigilar". Sin embargo en su propio
trabajo, que se convirtió en la Vulgata latina, el santo emplea el término
"aplastar" (conterere) en primer lugar, y "estar al acecho" (insidiari) en
segundo. Por tanto el castigo infligido a la serpiente y la venganza de ésta
están expresadas con el mismo verbo: pero la herida sufrida por la serpiente es
mortal, ya que afecta a la cabeza, mientras que la herida causada por ella no es
mortal, ya que es infligida en el talón.
El segundo punto de diferencia entre el texto hebreo y nuestra versión se
refiere al agente que va a infligir la herida mortal a la serpiente: nuestra
versión coincide con el texto actual de la Vulgata en traducir "ella"(ipsa) que
se refiere a la mujer, mientras que el texto hebreo traduce "hu´" (autos, ipse)
que se refiere a la descendencia de la mujer. Según nuestra versión y la
traducción de la Vulgata, será la mujer quien obtenga la victoria; según el
texto hebreo, ella vencerá a través de su descendencia. Es en este sentido en el
que la Bula "Ineffabilis" atribuye la victoria a Nuestra Señora. La versión
"ella" (ipsa) no es ni una corrupción intencionada del texto original ni un
error accidental, sino que es una versión explicativa que expresa explícitamente
el hecho de la participación de Nuestra Señora en la victoria sobre la
serpiente, que está contenido de manera implícita en el original hebreo. La
fuerza de la tradición cristiana referente a la participación de María en esta
victoria puede deducirse del hecho de que S.Jerónimo mantuviera "ella" en su
versión a pesar de su familiaridad con el texto original y con la traducción
"él" (ipse)en la antigua versión latina.
Dado que es comúnmente admitido
que el juicio divino se dirige no tanto contra la serpiente como contra el
causante del pecado, la descendencia de la serpiente hace referencia a los
seguidores de la serpiente, la "progenie de víboras", la "generación
de víboras", aquellos cuyo padre es el Diablo, los hijos del mal,
imitando, non nascendo (Agustín) (2).
Puede darse la tentación de
comprender la descendencia de la mujer en un sentido colectivo análogo,
abarcando a todos los nacidos de Dios. Pero "descendencia" puede no sólo
referirse a una persona en particular, sino que generalmente tiene dicho
significado, si el contexto lo permite. S. Pablo (Gálatas 3:16) da esta
explicación de la palabra "descendencia" tal como aparece en las promesas de los
patriarcas: "A Abraham y a su descendencia fueron hechas las promesas. No dice a
sus descendencias, como de muchas, sino de una sola: "Y a tu
descendencia", que es Cristo. Finalmente la expresión "la mujer" en la frase
"Pondré enemistad entre ti y la mujer" es una traducción literal del
texto hebreo. La Gramática Hebrea de Gesenius-Kautzsch (3) establece la norma:
es un rasgo peculiar del hebreo el uso del artículo para indicar una persona o
cosa todavía desconocida o que todavía está por describir con claridad, ya se
encuentre presente o tenga que considerarse bajo las condiciones del contexto.
Dado que nuestro artículo indefinido cumple este propósito, se podría traducir:
"Pondré enemistad entre ti y una mujer".
Por tanto la profecía promete
una mujer, Nuestra Señora, que será la enemiga de la serpiente en un grado
sobresaliente. Además, la misma mujer saldrá vencedora sobre el Demonio, al
menos a través de su hijo. La rotundidad de la victoria es subrayada por la
frase contextual "comerás tierra", que es según Winckler (4) una antigua
y común expresión oriental que denota la máxima humillación. (5)
[1] Quaest. hebr. in Gen., P.L., XXIII, col. 943 [2] cf. Wis., ii, 25;
Matt., iii, 7; xxiii, 33; John, viii, 44; I, John, iii, 8-12. [3] Hebräische
Grammatik, 26th edit., 402 [4] Der alte Orient und die Geschichtsforschung,
30 [5] cf. Jeremias, Das Alte Testament im Lichte des alten Orients, 2nd
ed., Leipzig, 1906, 216; Himpel, Messianische Weissagungen im Pentateuch,
Tubinger theologische Quartalschrift, 1859; Maas, Christ in Type and Prophecy,
I, 199 sqq., New York, 1893; Flunck, Zeitschrift für katholische Theologie,
1904, 641 sqq.; St. Justin, dial. c. Tryph., 100 (P.G., VI, 712); St. Iren.,
adv. haer., III, 23 (P.G., VII,, 964); St. Cypr., test. c. Jud., II, 9 (P.L.,
IV, 704); St. Epiph., haer., III, ii, 18 (P.G., XLII, 729).
|