“Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido”. (Juan 16:24). Dios quiere que la oración produzca gozo. Cada creyente verdadero quiere tener comunión con Él, hablar con Él y dejar que Él se involucre en cada detalle de tu vida. Hay multitudes que pasan sus vidas pensando que tienen que orar, y por lo tanto no se dan cuenta de que quieren orar. Como seres humanos, fuimos creados por Dios para tener libertad, y no para el legalismo. Debemos ser guiados por el Epíritu Santo, y no por las demandas de la ley. Si queremos tener gozo en la oración, debemos estar dispuestos a seguir al Espíritu Santo. Él trae variedad a nuestra vida de oración. Podemos tener comunión con el Señor todo el día, y presentarle distintas peticiones, además de expresar gratitud y alabanza. En mi vida personal de oración, hay días en que intercedo; otros días estoy alabando y adorando; otras veces, simplesmente disfruto de la presencia de Dios, gozando el tiempo com Él. No pongas a Dios en una cajita. Él tiene muchas maneras de guiarte, si le permites ser el guía, y tú el seguidor. Haz esto: Ten comunión con Dios ahora mismo. Habla con Él, y deja que Él se involucre en cada detalle de tu vida.