El primero de agosto la Asamblea Nacional denunció el trato arbitrario de que es víctima Gerardo Hernández Nordelo a quien se le obstaculiza o impide el acceso a documentos legales relacionados con su caso. Han pasado diez días y la situación sigue igual. Como saben las autoridades norteamericanas a comienzos de la próxima semana se vence un plazo decisivo en el proceso de su apelación extraordinaria (Habeas Corpus).
Debemos exigirles una vez más que pongan fin de inmediato a esta situación injusta e ilegal y reclamamos nuevamente la solidaridad de todas las personas honestas.