En abril, el Ejército trasladó al Soldado Bradley Manning de una celda de confinamiento solitario en Quantico, Virginia a la prisión federal de Leavenworth, Kansas. En Quantico, según un informe de Human Rights Watch (Vigilancia de Derechos Humanos), los militares habían puesto grilletes a Manning, lo dejaron desnudo y lo aislaron. El gobierno explicó que realizaron estos hechos aparentemente crueles porque temían que Manning se suicidara.