Sofisticados medios masivos de información habían estado saturando nuestras mentes con noticias de riesgos de guerras fraticidas, tráficos de armas asociados a las drogas que en solo cinco años mataron más de 35 mil personas en México, cambios climáticos en diversos países, calores asfixiantes, montañas de hielo derritiéndose en los polos, lluvias diluvianas, escasez y precios crecientes de alimentos.
Estábamos realmente necesitados de consuelo y éste nos acaba de llegar a través de ese ángel salvador de nuestra especie, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y su colosal invento: los certificados de buena conducta