Algunos médicos en Estados Unidos muestran su preocupación por la falta de personal y condiciones para atender la avalancha de pacientes que podría sobrevenir una vez que entre en vigor la ley de seguros impulsada por el Gobierno de Barack Obama.
Fallas técnicas en el portal gubernamental healthcare.gov impidieron a ciudadanos solicitar las pólizas a las compañías aseguradoras, elemento aprovechado por los republicanos para arremeter contra la legislación considerada como el principal logro de la administración del presidente Barack Obama.
No obstante, dichos problemas también motivan quejas de los galenos, inquietos ante la imposibilidad de estimar el número de personas que pudieran acudir a hospitales y clínicas a partir del 1 de enero próximo, reportó la cadena televisiva estadounidense CBS News.
Entonces comenzará a regir la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, más conocida como ObamaCare.
Cálculos indican que el número de pacientes podría incrementarse en nueve millones en este país, donde unos 48 millones de personas carecen de seguro de salud.
La nueva ley obligará a todo ciudadano a contratar un seguro médico a partir de 2014, bajo la amenaza de multas de hasta un 2,5 por ciento del salario.
El doctor Brigit Britton, quien trabaja en una clínica de urgencias en Washington, explicó a la televisora que muchos de los enfermos requerirán tratamientos especiales para enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión, para lo cual hacen falta recursos adicionales.
Subrayó que la explosión en el número de pacientes exigirá en un futuro próximo duplicar el personal de atención, incluidos los asistentes.
La necesidad de ayudantes y personal de enfermería a nivel nacional será crítico, ya que la cantidad de personas que acudan a centros asistenciales aumentará más rápido que el número de graduados de Medicina, alertó.
Estados Unidos no está preparado para garantizar la demanda de médicos y especialistas para satisfacer la incorporación de unos 35 millones de personas al sistema sanitario el próximo año, ni el incremento de la población que se adentra en los 65 años y requiere cuidados.
Un reciente estudio de la Asociación de Universidades Americanas de Medicina (AAMC, por sus siglas en inglés) prevé para 2020 una escasez de 91 mil 500 facultativos, cifra que podría superar los 130 mil en 2025.
Aunque la AAMC amplió el número de matrículas en las facultades de medicina para intentar paliar el problema, las admisiones para realizar el período de residencia poseen un límite, fijado por ley desde 1997.
A ello se suma la falta de recursos federales para subvencionar la formación profesional, lo cual impide que todos los graduados pasen a consultas, fenómeno que agrava las perspectivas, subraya el texto.
(Con información de PL)