El español Rafael Nadal disputará los octavos de final de Wimbledon ante el australiano Nick Kyrgios, 144 del mundo, que ganó en la tercera fase al checo Jiri Vesely, número 68 de la ATP, por 3-6, 6-3, 7-5 y 6-2, en dos horas y cuatro minutos. Kyrgios, de 19 años, deslumbró en el último Abierto de Australia al poner contra las cuerdas al francés Benoit Paire, 71 del ránking (6-7(5), 6-7(5), 6-4, 6-2, 6-2). "Le vi jugar en Australia este año. Recuerdo ese partido ante Paire. Es un jugador joven y siempre son peligrosos, siempre tienen algo especial. Juegan sin presión y están frescos", analizó el mallorquín tras su partido de tercera ronda. Nadal, por su parte, selló su pase a la siguiente fase del Grand Slam sobre hierba al superar al kazajo Mikhaíl Kukushkin por 6-7(4), 6-1, 6-1 y 6-1 en la central del All England Club.
El de Manacor que nunca ha caído en la segunda semana del torneo antes de la final, ha recuperado su mejor nivel en hierba en sus tres primeros partidos este año en el All England Club, donde las dos últimas temporadas no pudo pasar de las rondas iniciales. Con la lesión de rodilla que le apartó durante meses de las pistas ya superada y con las molestias en la espalda que lastraron sus primeros pasos en París este mes controladas, Nadal se ve con fuerzas para batallar por su tercer Wimbledon (ya ganó en Londres en 2008 y 2010).
A pesar de la alegría por estar en la segunda semana de Wimbledon, a la que no llegaba desde hace tres años, el español se mostró molesto en la rueda de prensa posterior al partido por las críticas que han vertido en los últimos días jugadores como el suizo Roger Federer y el checo Lukas Rosol sobre la pérdida de tiempo entre los puntos de los partidos.
"Llega un momento en el que la cancioncita ya cansa. Que arbitren los árbitros. Ya basta de llegar aquí a la prensa a poner siempre presión y hablar siempre de las mismas cosas", dijo aparentemente enfadado.