El encuentro entre Donald Trump y Vladímir Putin programado para este viernes es, sin duda, uno de los eventos más esperados de la cumbre del G20, que se celebra en la ciudad alemana de Hamburgo los días 7 y 8 de julio.
La posibilidad de un encuentro bilateral está en el aire desde hace varios meses, durante los cuales el presidente de EE.UU. ya se ha reunido con los líderes de más de una docena de países.
Sin embargo, la reunión solo se hace realidad seis meses después de la toma de posesión de Trump, en gran medida debido a la presión que sufre el mandatario norteamericano por parte del 'establishment' estadounidense, que acusa a Moscú de haberse inmiscuido en las elecciones presidenciales de EE.UU.
¿Qué discutirán?
Según ha revelado el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, la situación en Siria será el tema clave de las negociaciones. "Si no conseguimos la estabilidad en Siria, nuestros avances para derrotar al Estado Islámico pueden quedar anulados", ha declarado.
Tillerson también ha aseverado que ambos líderes abordarán las relaciones bilaterales entre Moscú y Washington. En referencia al estado actual de esas relaciones, el canciller estadounidense ha indicado que los dos países "están al principio" del camino.
A su vez, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha señalado que durante la reunión los mandatarios tratarán la situación en Ucrania y Siria.
Un encuentro que le da miedo a la élite mundial
Según escribe el analista Piotr Akópov en el diario 'Vzgliad', durante los ocho meses transcurridos desde la elección de Trump como presidente y los cinco meses y medio desde su investidura, la élite estadounidense ha estado haciendo "todo lo posible para limitar al máximo la libertad de acción" del mandatario en esta reunión.
La razón es que tanto Putin como Trump "por sí mismos, a causa de sus opiniones", son "una amenaza para el viejo orden mundial, las élites y los planes de la globalización", y "¿qué pasa si deciden, si no cooperar, al menos coordinar sus acciones?", se pregunta el analista.
Es por ese motivo que la élite está tratando de dar instrucciones a Trump acerca de qué y cómo tiene que discutir en su reunión con Putin, opina el experto, quien pone como ejemplo el editorial del domingo de 'The Washington Post', titulado 'Qué debería decir Trump cuando se reúna con Putin por primera vez'.
"Lo importante es que empiece el diálogo"
Debido a esta situación política interna en EE.UU., los expertos advierten contra el exceso de expectativas en torno a los resultados de la primera reunión entre los presidentes.
En este sentido, Serguéi Karatáyev, experto del Centro de Estudios Económicos de Rusia, explica que cualquier avance se convertiría "en un problema tanto para Trump como para sus opositores", que le acusarían de "haber cedido" ante Rusia. Por lo tanto, los resultados serán "muy modestos", predice el analista, quien, sin embargo, señala que lo más importante es que se inicie un diálogo.
En la misma línea, el director del Instituto de EE.UU. y Canadá, Valeri Garbúzov, subraya que la reunión en Hamburgo no persigue el objetivo de llegar a ningún acuerdo concreto, sino que "sería el comienzo de un diálogo casi ausente ahora al más alto nivel".
Finalmente, Akópov también indica que no importa tanto la agenda específica de la reunión como la oportunidad de que ambos líderes por fin se conozcan en persona, "comprueben la impresión que tienen el uno del otro", y entiendan si pueden confiar mutuamente. Para ese anal