“Maria Madre Mía; Líbrame De Caer En Pecado Mortal”
Por El Poder Que Te Concedió El Padre Eterno. 1.-) ¡AVEMARIA! …
Por La Sabiduría Que Te Concedió El Hijo. 2.-) ¡AVEMARIA! …
Por El Amor Que Te Concedió El Espíritu Santo. 3.-)¡AVEMARIA! … Finalizamos con un ¡GLORIA PATRI… (Gloria Al Padre Y Al Hijo Y Al Espíritu Santo Como Era En Un Principio Ahora Y Siempre Por Los Siglos De Los Siglos Amen.)
La siguiente Jaculatoria fue indulgenciada por San Pío X, y la recomendó rezar junto con esta devoción: ¡Oh María, por tu Inmaculada Concepción, purifica mi cuerpo y santifica mi alma!