El Espiritu Santo es luz. Eso significa muchas cosas:
La luz del sol hace posible la vida.Si el sol se apagara, la vida desapareceía de esta tierra.Por eso, la luz simboliza la vida, y el Espiritu Santo es una fuente permanente de vida.Habitando en lo más íntimo de cada cosa, la hace existir con su poder.Pero de un modo especial, el Espiritu Santo es vida para nuestra intimidad, porque él es amor, y sin el amor no hay vida que valga la pena.
La luz también es necesaria para caminar, para ver el camino, para saber a dónde vamos.Si alguna vez hemos hecho la experiencia de caminar a oscuras, perdidos y desorientados, sabemos lo que significa la luz. Y cuando aparece una pequeña claridad que nos orienta, la amamos y la agradecemos. El Espiritu es luz.El nos hace descubrir por dónde tenemos que caminar y hacia dónde tenemos que ir.Cuando lo invocamos con sinceridad, él nos ilumina para tomar las decisiones correctas.
La luz también nos permite ver las cosas, descubrir sus colores, sus bellezas.Cuando dejamos que el Espiritu Santo ilumine cada cosa, podemos ver su hermosura y disfrutarlas mucho más.
Demos gracias al Espiritu Santo porque él derrama su luz en nuestras vidas.