Señor, las horas de espera se hacen interminables.
Pasan tantas cosas por mi mente: el éxito de la operación.. mi futuro y el de mi familia....
Estoy angustiado porque se trata de mi cuerpo, de mi vida.
Dirijo a Ti mi súplica, Señor, porque Tú puedes transformar mi miedo en confianza, mi ansiedad en fortaleza.
Amén.