Hoy me encuentro tras mi máscara,
porque la falsedad es cruel y daña,
porque la confianza no es dueña,
y porque la soledad, mi única coraza.
Hoy me encuentro tras mi máscara,
tal vez, mucho tiempo compañera,
pero ahora... ahora, duradera;
ahora, que ya ha llegado a mi alma.
Hoy me encuentro tras mis máscara,
pues tras de mí no hay huella alguna,
pues conmigo la tristeza y amargura,
pues de mí, no se puede esperar nada.
Hoy me encuentro tras mi máscara,
una máscara que me protege del mal,
que me inunda de miedo e inseguridad,
que me llena de fracaso y soledad.
Hoy me encuentro tras mi máscara,
una máscara que me cuesta de quitar,
porque la paz no llega a mi alma,
porque mi alma es mi único bienestar.
Hoy me encuentro tras mi máscara,
porque duele la mentira y la falsedad,
y no deseo dejarla mientras pueda,
hasta que mi corazón no halle la verdad.
Hoy me encuentro tras mi máscara,
y ganas tengo de poder respirar,
sin ilusiones y con mucha espera,
sé que algún día me la podré quitar.
Autora: Rosa Mª