Cuántas estrellas tendrá
el mar esta noche…
Cuántas olas, cuántas almas
en pena, cuántos verdores
que tan sólo el Vengador
oculta y conoce…
Abierta la noche está
como un gran sueño.
Los nombres,
los lugares, los caminos,
las horas, los montes,
se han borrado.
Sólo queda
Yo le diría, Amor, yo le diría
Yo le diría, amor, yo le diría
que no esté tan seguro de su abrazo,
tan fuerte de mi pena,
tan firme de mi lágrima.
Yo le diría, amor, que no me duela
con la certeza de tenerme tanto
porque yo sé también cómo te pierdes
sin un reproche, sin una palabra,
a veces, casi, casi con dulzura
y de pronto, no estás.
y no está nada.
Yo le diría, amor, yo le diría
que no se sienta fuerte de mi llanto,
que la pasión se hunde
como arena en el agua;
que tenga miedo, amor, como yo tengo
de la noche sin alba,
de las hojas que aún parecen vivas
y ya no tienen savia,
de ese momento cuando se atraviesa
el borde del espanto,
del despertar sin recordar siquiera,
del límite entre el muro y la esperanza.
Yo le diría
que llegará una tarde sin mañana,
la tarde en que la lluvia sólo
es agua:
apenas una cosa entre las cosas.
Y tengo miedo, amor.Y estoy callada.
Julia Prilusky Farny