Comenzaremos fundiendo a fuego lento, 25 grs. de mantequilla. Seguidamente pelaremos las manzanas, les eliminaremos las semillas, las trocearemos, y las colocaremos en una sartén con una pizca de sal y una cucharadita de la mantequilla fundida. Taparemos la sartén, y dejaremos que se cuezan las manzanas a fuego medio, hasta que se nos haga una compota.
Una vez lista la compota, la mezclaremos con la levadura y el agua. A continuación, tamizaremos las harinas con una pizca de sal, y las mezclaremos también con la compota, removiendo bien hasta conseguir una mezcla homogénea. Dejaremos reposar todo durante una hora. Transcurrido ese tiempo, moveremos y mezclaremos de nuevo todo, y lo dejaremos reposar tapado, durante media hora más.
A continuación diluiremos una cucharada de la mantequilla que teníamos reservada, junto con la yema del huevo, mientras por otro lado batimos la clara a punto de nieve. Seguidamente añadiremos la clara y la yema, a la masa que teníamos reservada.
Seguidamente, untaremos una sartén con el resto de la mantequilla, y dejaremos que se nos funda. Añadiremos a la sartén una cuarta parte de la masa, y la coceremos a fuego lento hasta que veamos que salen burbujas. En ese momento, voltearemos la masa, y la coceremos durante cinco minutos más por ese otro lado. Repetiremos este procedimiento para las otras tres blinis que haremos con el resto de la masa.
A continuación, mezclaremos el yogur con la piel de medio limón rallada. Cubriremos cada blini con una loncha de salmón y de bacalao ahumados, y añadiremos unos brotes de alfalfa por encima. A continuación añadiremos un poco de caviar (o sucedáneo).
Finalmente serviremos los blinis, acompañados de la salsa de yogur a un lado de cada plato. |