YACE TU VOZ
Yace tu voz quebrantada en el cristal
rota en la inmensidad de tu silencio…
Perforada al viento níveo de desprecio
al caer tu rigidez arrullo de templanza.
Todo a quedado al cerrojo del olvido
solo queda musicalidad en tus notas
en el templado acero de quien cautivas
al sonoro filo de tu agraciado encanto.
Tu voz aun es soberana en las estrellas
tan fina orfebrería estas en mi corazón
en el templado horno aún doro tu amor
así estés perdida tú, de mi clarividencia.
Fuiste alas levantadas al sol y al viento
izadas en amor y oráculo de esperanza
al concentrarte como oro puro en riqueza
brillas tú, inquebrantable en mi recuerdo.
No hay sables en mí, que corten tu belleza
puede ser esquirlas esparcidas por el cielo
mas luce tu presencia reflejada en espejos
al ser lienzo sagrada melancolía de caricias.
Estas ahí en el vaho de las más finas sedas
en la invisible esencia de halados perfumes
de nuevo te recojo en consentidas aspírales
para verte en mi trono cómo mi amada musa.
Leo Frank Park